Los 85 años del Doctor Bilardo, un experto en clásicos

Como jugador, entre 1966/70 jugó ocho y perdió uno solo. Ya como entrenador de Estudiantes -en tres ciclos- enfrentó 19 veces a Gimnasia, con 8 triunfos, 7 empates y 4 derrotas

Edición Impresa

Por MARTIN CABRERA

mcabrera@eldia.com

Carlos Salvador Bilardo es una de las personas más destacadas en el fútbol nacional e internacional, que hoy celebra 85 años, justo cuando la Ciudad está en la antesala de un nuevo clásico entre Gimnasia y Estudiantes. Y el Narigón es, sin lugar a dudas, uno de los protagonistas más importante de la rica historia de ambos clubes enfrentándose en una cancha de fútbol.

El Narigón celebrará su cumpleaños en su apartamento de la Ciudad de Buenos Aires, donde pasa gran parte del tiempo tras ser diagnosticado con el síndrome Hakim-Adams, una enfermedad neurodegenerativa que sufre desde 2018 y por la que debe estar con cuidados constantes.

Bilardo, que fue el técnico de la Selección campeón y subcampeón del mundo en 1986 y 1990, respectivamente, tiene ocho clásicos oficiales como jugador y 19 como entrenador, todos en el Pincha. Sin dudas, una marca registrada siendo de los máximos protagonistas y de los pocos que estuvo como jugador y entrenador.

Su primer clásico lo disputó el 14 de abril de 1966, a menos de cuatro meses de haber desembarcado en La Plata. En el Metropolitano jugó primero en el Bosque (luego de una lluvia torrencial) y luego en 57 y 1. Los dos partidos terminaron 0-0.

Al año siguiente Bilardo jugó en los dos partidos del torneo Metropolitano, primero como visitante y otro clásico en cero. El segundo interzonal se disputó en la cancha de Estudiantes y ganó el local 3-0, resultado que lo clasificó a las semifinales del torneo del que sería campeón. Fue el primer triunfo del Narigón en un clásico platense.

En 1968 participó del equipo que goleó 6-1 en el Bosque (ya ganaba Estudiantes 4-0 al término del primer tiempo). Antes habían empatado 3-3 en 57 y 1 pero Bilardo no lo jugó por estar lesionado.

Al año siguiente fue parte del equipo que ganó 1-0 como local y en 1970 fue titular en dos de los tres clásicos del año: el 3 de mayo empataron 1-1 en la cancha de Estudiantes por el Metropolitano y el 15 de noviembre integró el equipo que cayó 4-1 en el Bosque lo que fue su despedida como jugador. El Lobo se clasificó a la semifinal de ese torneo pero cayó ante Rosario Central. El gran equipo de Don Osvaldo Zubeldía empezaba a despedirse de la elite.

No se había cumplido un año de su último clásico como jugador que lo hizo como entrenador. Fue el 12 de septiembre de 1971, cuando a pedido de sus compañeros agarró un equipo que peleaba el descenso. Obtuvo 19 puntos de 24 y entre ellos el clásico 2-1 en el Metro. Tras el torneo se fue con la tranquilidad de haber salvado al equipo de perder la categoría.

Volvió a ser convocado como técnico en 1973. Estuvo cuatro campeonatos con muy buena performance a nivel nacional y también local. Si bien el primer clásico lo perdió 3-1 como local por el Metro, obtuvo buenos resultados: 1-1 en la revancha en el Bosque y mismo resultado por el Nacional.

En el ‘74 el Pincha ganó 2-1 como local y cayó 1-0 de visitante. En el Nacional triunfó 2-0 el primer partido y perdió 2-1 el restante. Mejor le fue al año siguiente: dos empates (3-3 y 1-1) en el Metro y 2-1 y 1-1 en el torneo Nacional.

En 1976 dirigió su último torneo al Pincha con un empate en el Bosque y triunfo 2-1 como local con dos goles de Cabezas. Los dos terminaron entre los primeros y se clasificaron a la ronda final. Por eso se volvieron a encontrar y, en el estadio albirrojo, ganó el equipo del Doctor Bilardo 1-0 con un golazo de Pagnanini de tiro libre. En el Nacional ganó de visitante 2-1 y perdió 1-0 como local, resultado que no le permitió jugar la ronda final.

En su cuarta y última etapa como entrenador del Pincha, entre 2003/4, dirigió dos clásicos, las ediciones 134 y 135. El primero de ellos se disputó el 5 de octubre de 2003 en 57 y 1 con la particularidad de que Estudiantes podía quedar en desventaja en el historial general del clásico después de 58 años. Llegaron igualados en victorias y el 1-0 con gol de José Sosa le significó mantener la diferencia que desde esa fecha hasta la actualidad le pertenece. Ese partido fue el último como entrenador de local, porque unos meses después se jugó otro partido pero en la cancha de Gimnasia, que tenía como entrenador a otro ilustre destacado en la historia del clásico platense: Carlos Timoteo Griguol. El 4 de abril de 2004 empataron 2-2 un partido que se jugó con una inusual ola de calor y un 2-0 de equipo del Narigón que no pudo sostener. Esa fue, sin saberlo, su despedida de los duelos de la Ciudad.

 

Carlos Salvador Bilardo
Estudiantes

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE