Lluvia de cenizas por otra erupción del volcán Etna

Debido al copioso colchón de partículas en el pavimento, el aeropuerto internacional de Catania, en Sicilia, suspendió los vuelos

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El volcán italiano Etna, el más activo de Europa, registró ayer una nueva erupción que expulsó una nube de ceniza sobre la ciudad a sus faldas, Catania, obligando a suspender el tráfico en su aeropuerto por motivos de seguridad.

“A causa de la actividad eruptiva del Etna y la caída de copiosa ceniza volcánica sobre el pavimento del aeropuerto, las operaciones de vuelo quedan suspendidas hasta que se recuperan las condiciones de seguridad”, anunció en un comunicado la gestora del aeródromo.

El Etna atraviesa una de sus frecuentes erupciones que suelen cubrir de ceniza las ciudades sicilianas a su alrededor.

Esta última sólo puede ser controlada con la tecnología ya que el cráter del volcán, a unos 3.300 metros de altura, permanece cubierto por las nubes, debido al temporal que azota actualmente a la isla de Sicilia.

El Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) confirmó esta nueva erupción, cuyos estruendos fueron escuchados en las localidades de Adrano y Biancavilla, en su ladera suroeste, justo la dirección prevista en la dispersión de la nube.

Los temblores registraron un “nivel alto” ya a la madrugada y la erupción implicó la lluvia de cenizas en Catania.

MELONI EN ZONAS INUNDADAS

En tanto, la primera ministra italiana Giorgia Meloni se calzó las botas de lluvia y visitó hogares inundados en el noreste de Italia ayer, tras regresar de manera anticipada de la cumbre del G7 en Japón.

Meloni afirmó estar “conmovida” por lo que vio, y consideró “difícil estimar” los daños causados en la región.

“El gobierno está aquí. Fue una tragedia, pero es la oportunidad para renacer más fuertes. Es difícil hacer estimaciones, pero vamos a movilizar muchos recursos. Ahora, nuestra misión, con el trabajo increíble de Defensa Civil y las fuerzas del orden, es dar respuestas inmediatas”, dijo Meloni a periodistas.

“Hicimos la primera estimación, pero hasta que no estemos seguros, es muy difícil estimar daños”, agregó, refiriéndose a que aún hay alerta roja para toda la zona, por el riesgo de derrumbes.

La premier subrayó que su visita también sirve para “entender” cuáles son las necesidades más urgentes de las ciudades y no descartó “utilizar el Fondo Europeo de Solidaridad” para completar las cantidades necesarias.

Asimismo, Meloni elogió los trabajos de las personas en las ciudades visitadas y también de los muchos voluntarios que vinieron de otras partes de Italia para ayudar con servicios de limpieza y reconstrucción.

Uno de los compromisos de la primera ministra era una reunión con líderes regionales y locales en el ayuntamiento de Ravena, a pocos kilómetros del mar Adriático, uno de los más afectados por las fuertes inundaciones causadas por las lluvias.

En la reunión también participó Stefano Bonaccini, gobernador de Emilia-Romaña, la zona afectada.

 

 

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