Enrique fue apartado y su futuro es una incógnita

En la previa al viaje de la delegación de Gimnasia rumbo a Paraná para hacer noche y luego jugar ante Colón en Santa Fe, la lista de convocados tuvo una ausencia que llamó la atención en los hinchas mens sana. Y es que Guillermo Enrique, habitual alternativa en el lateral derecho e incluso quien ha alternado en el puesto con Bautista Barros Schelotto, fue desafectado del cruce por un nuevo episodio de indisciplina que lo tuvo como protagonista.

Según lo que pudo averiguar este matutino, el mismo tuvo lugar en la mañana del miércoles en Estancia Chica, con un primer momento en el que Enrique, fiel a su estilo de entrenar siempre al ciento por ciento, le fue muy fuerte a Benjamín Domínguez, lo que generó una reacción grupal.

Frente a esto, el correntino se cruzó con varios compañeros, pero la discusión más acalorada la tuvo con Nicolás Cabrera, Ayudante de Sebastián Romero.

Ante esto, el lateral se fue en soledad de la práctica y retornó al día siguiente, entendiendo lo que había sucedido y con otro semblante distinto al mostrado tras el incidente.

Ya en la mañana de jueves, nuevamente en el predio que el Lobo posee en Abasto, Enrique pidió disculpas por el episodio, uno más de los que ha tenido en el último tiempo, y desde el cuerpo técnico se las aceptaron.

Sin embargo, tras ello lo mandaron a trabajar en el gimnasio, razón por la cual quedó directamente desafectaron del partido de ayer con Colón en Santa Fe.

Lo concreto es que ahora su futuro inmediato en el club es una verdadera incógnita. La idea de la dirigencia es lograr que salga a préstamo a alguna institución. Si puede tratarse de una del exterior, mejor.

Pese a ello, luego de los intereses semanas atrás de Racing y Talleres de Córdoba, no ha habido más que algunas consultas que nunca se tradujeron en ofertas formales para con el jugador de 23 años que supo debutar en Gimnasia de la mano de Néstor Gorosito en noviembre del 2021.

un episodio más, que podría ser el último suyo en el lobo

No son pocos los que desde su aparición en las juveniles del Tripero han destacado las condiciones de Enrique. De hecho, varios entrenadores lo han considerado de las mejores apariciones en su puesto debido a su entrega y a una capacidad física que siempre ha llamado la atención.

Sin embargo, los ya recurrentes episodios de indisciplina que lo han acompañado en este escueto tiempo en la Primera División, parecen haber colmado ahora también a la dirigencia albiazul.

Lo cierto es que todo parece indicar que su futuro no estará con el equipo profesional del Lobo, con el que acumuló un total de 60 partidos, 52 de ellos en condición de titular, en los que además sumó un gol (ante Vélez), 12 tarjetas amarillas y una tarjeta roja.