Continuidad que defiende cada vez que sale al campo

Por MARTIN MENDINUETA

@firmamendinueta

El compromiso era tan valioso como importante para Gimnasia, pero totalmente decisivo para la situación de su director técnico, Leonardo Madelón. Así, el equipo sumó tres puntos muy valorados (todavía puede clasificar entre los cuatro mejores de su zona) y el entrenador, “una vida” que estira y prolonga su segundo ciclo profesional en el club.

El momento que vive el Lobo se vio reflejado con nitidez en los vaivenes de una tarde nada sencilla. Cuando se puso en ventaja mediante uno de sus dos máximos referentes (Leo Morales) la gente cantaba y sonreía. Segundos después del empate que consiguió Herrera con su golazo (nada que achacarle a Nelson Insfrán), la atmósfera se contaminó de fastidio, quejas diversas e insultos hirientes, especialmente para el técnico.

La película, exigente porque le demandaba al dueño de casa un despliegue físico sin respiro, continuó hasta desembocar en el alarido vital de Eric Ramírez, poniendo al Lobo otra vez arriba en el marcador.

Después de semejante explosión popular a puro desahogo, regresaron las voces de aliento y el DT estuvo bien en una segunda ventana de cambios que apuntaron a cuidar lo que había conseguido.

El pitazo final del juez Gariano descomprimió por completo un escenario cambiante y atado al resultado. Leonardo Madelón continúa siendo el tutor mens sana porque el equipo sumó todo lo que había juego. Si el partido terminaba 1 a 1, el ambiente hostil habría sido muy difícil de sobrellevar.

Puede ser injusto y demasiado cruel, pero los hinchas aguantan y sostienen lo que está en funcionamiento sí y sólo sí los resultados, especialmente de local, no les amargan la jornada.

EL PATA CASTRO GENERÓ MÁS JUEGO Y AYUDÓ A DE BLASIS

Fue un acierto la vuelta a la titularidad de Lucas Castro. Aún sin la dinámica de sus mejores épocas, su buen pie entrega pases certeros que colaboran para que Gimnasia crezca en el armado colectivo.

El Pata no aguanta el ritmo que sí se banca Pablo De Blasis (hombre clave en esta coyuntura y el segundo gran referente del plantel), pero lo ayuda en la difícil tarea de conducir.

Ganó poniendo el resultado en riesgo por defectos conocidos. Madelón sigue y nadie sabe qué pasará al final del torneo.