Se fue jugando serio y ese fue su mejor rasgo
Edición Impresa | 9 de Junio de 2024 | 03:05

Por MARTIN MENDINUETA
Eliminado sí, pero vacío de orgullo y de carácter, no. Estudiantes se marchó del torneo que más le gusta jugar dejando una nítida imagen de equipo serio y bravo. Haber llegado a Curitiba ya eliminado lejos estuvo de empujarlo a la desidia.
Eduardo Domínguez, a pesar de algunas bajas obligadas (como las de Carrillo y Ascacibar) armó una formación donde, sin dudas, ganó protagonismo Fernando Zuqui y le permitió al entrenador sacar conclusiones de cara al segundo semestre.
Lo mejor del Pincha fue la predisposición que puso de manifiesto en cada cruce o pelota disputada. Fue al frente como si el partido pudiera entregarle alguna chance matemática de clasificar a los octavos de final.
El resultado fue justo porque Gremio jamás se sintió cómodo en un trámite con algunos roces y ningún tipo de permisividad por parte del huésped. Aún con errores y carencias, el Léon le hizo saber en todo momento a su rival que estaba dispuesto a jugar con intensidad hasta el último segundo.
POSTURA SALUDABLE DEL LEÓN, QUE SE HIZO RESPETAR POR SU OPONENTE
Sin brillos ni ejerciendo un dominio constante, Estudiantes se mostró en la etapa inicial con una actitud saludable. Concentrado y firme en cada acción, sin importar el lugar del campo, el equipo que puso en cancha Domínguez jugó un buen primer tiempo.
La multitud tricolor advirtió rápidamente que el triunfo que quería no sería un trámite sencillo de concretar. Para cualquier espectador que no estuviera al tanto de la ubicación de ambos en la tabla de posiciones, el ida y vuelta ofreció los matices de un típico cruce entre argentinos y brasileños.
BUENOS INGRESOS DESDE EL BANCO Y UN GOL CHARRÚA GRITADO A FONDO
El alarido y largo festejo de Mauro Méndez (gracias a las dudas que frenaron la salida de Marchesín para cortar el centro) resultó el broche apropiado para una producción digna.
Jugó así por lo que representa su escudo, el peso de la rica historia institucional y, también, porque necesitaba entregar una imagen que no dañara todavía más la triste realidad de estar último en su zona.
La presencia de Zaid Romero ratificó su compromiso con el grupo humano que lo ayudó a crecer tanto, el rendimiento de Zuqui fue sumamente útil para el equipo, Javier Correa ratificó que se siente muy cómodo con la camiseta Pincha y Mauro Méndez, guste más o menos su forma de jugar, que siempre deja todo lo que tiene.
Esta temprana eliminación debe servir como aprendizaje. En la Libertadores no hay rivales accesibles ni partidos fáciles. El año próximo volverá a disputarla y valorará al máximo cada segundo de cada noche copera.
Estudiantes se fue siendo un equipo serio y eso fue lo mejor.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE