Duro momento para una familia de Barrio Jardín

En horas de la mañana de ayer, un hombre de 47 años atendió un llamado de uno de sus hijos, sin imaginar la terrible noticia que iba a recibir: le habían entrado a robar en su casa de 115A entre 88 y 89.

Enseguida, abandonó sus ocupaciones y se dirigió a la propiedad, donde constató el faltante de una importante cantidad de objetos de valor.

En la recorrida por la finca, descubrieron el lugar de acceso: un ventiluz de un baño de la planta baja, por lo que se especula, que al igual del caso del policía saqueado en Melchor Romero (ver pág. 17), los ladrones pueden ser menores de edad o personas de contextura física delgada.

Entre los elementos faltantes mencionó cinco teléfonos celulares, dos de ellos pertenecientes a los amigos de sus hijos; una tostadora; dos cafeteras eléctricas; una tablet; una plancha; tres mochilas; un bolso deportivo; una PlayStation 2; cuatro relojes pulsera, uno de mujer y un perfume, entre otros.

Al parecer, todos esos bienes se encontraban en el sector de la cocina comedor.

El hecho, demás está decir, se da en un contexto de inseguridad generalizado en todos los sectores de la Ciudad.

Si bien los vecinos se están organizados a través de grupos de WhatsApp y redes sociales para compartir información, alertas y registrar movimientos sospechosos, la situación de los robos se muestra desbordada.

DESCONTROL

En Boulevar 82 entre 35 y 36, por su parte, hubo un intento de robo en una concesionaria de motos.

Hubo un detenido de 18 años y un menor de 12 llevado a la comisaría y posteriormente reintegrado con su familia.

El aviso de alerta llegó desde el 911 y ocurrió en el local “Moto 32”, donde los propios responsables del comercio lograron una aprehensión civil.

Se trataba del chiquito, a quien observaron en el preciso instante en que, junto al mayor, forzaban la persiana del frente.

Enseguida, como ese joven se había dado a la fuga, por las características físicas y vestimentas aportadas, se puso en marcha un operativo de saturación, hasta que lograron ubicarlo y detenerlo.

La escena quedó preservada con fines periciales, mientras se puso en conocimiento del hecho al fiscal penal en turno, Juan Mennucci.

Por el menor, se dio intervención al Servicio de Niñez y Adolescencia de la Municipalidad de La Plata.