La demanda de una madre por la muerte de su hija
Edición Impresa | 14 de Julio de 2025 | 05:46

A tres años del accidente en el que un auto impactó contra un camión en la autopista Panamericana producto de una persecución policial y dejó el saldo de tres muertos, la madre de una de las víctimas apuntó contra el conductor: “Era un delincuente”.
El 8 de julio de 2022, Malena Chiocconi, una joven de 21 años, fue rehén de una tragedia que se pudo haber evitado.
Su madre rememoró que su hija conoció vía Instagram a un muchacho identificado como Joel Guillermo Galván, de 25 años.
“Era la primera vez que Malena salía con un chico que conoció por las redes sociales”, precisó Daniela Fernández.
Sin embargo, “él le mintió en todo momento” porque “era un delincuente con un extenso prontuario que siempre arregló con jueces y fiscales”, sostuvo Daniela sobre Galván, quien enfrentaba casos por tenencia de armas y robo calificado.
El día del siniestro, Malena y Joel acordaron dirigirse en el Volkswagen Vento del joven a un bar situado en el partido bonaerense de San Miguel.
En el rodado, además de Chiocconi y Galván, viajaban Joaquín Mirko Fernández, de 23 años, y un adolescente de 16, cuyas iniciales son MG.
El conductor evitó un control policial en la zona de El Talar de Pacheco y se inició una persecución que terminó con el choque del VW Vento contra un camión estacionado en el ramal Campana.
“Algo pasó dentro del auto, Malena intentó escapar, una vecina alertó a la Policía y ahí comenzó una persecución policial donde el operativo cerrojo fue un desastre”, afirmó la madre de Malena, y añadió: “El auto perdió el control y terminó abajo de un camión”.
Malena, que se encontraba en el asiento del acompañante, Guillermo y Joaquín murieron en el acto, mientras que el menor de 16 sufrió lesiones de consideración y fue derivado a un hospital de la zona.
Antes del accidente, la chica le envío la ubicación en tiempo real vía WhatsApp a Daniela y le envió sus últimos mensajes: “Nos está siguiendo la poli. Dios mío, má. Estoy llorando”.
Los investigadores comprobaron que el vehículo fue robado en el distrito de Escobar y que le modificaron la chapa patente por la de un automóvil del mismo modelo, pero que estaba radicado en el Municipio de San Isidro.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE