Pacquiao quiere la revancha con Barrios
Edición Impresa | 21 de Julio de 2025 | 00:59

Manny Pacquiao regresó e hizo lo impensable. Hacer una gran pelea sobre un apático Mario Barrios, aunque no convenció a dos de los jueces, que dieron un empate mayoritario para que el estadounidense defendiera el título welter del CMB.
El “Pacman” Pacquiao, una leyenda del ring, volvió cuatro años después y con 46 de edad para quedarse muy cerca del título, pero el empate con tarjetas: 115-113, 114-114 y 114-114, en la pelea estelar de la función que se realizó en el MGM Grand de Las Vegas.
Fueron 12 asaltos contra un peleador mucho más joven, pero Pacquiao fue el que tomó la iniciativa y propuso en gran parte de la pelea; mientras que Barrios mostró mucho respeto por alguien que, semanas después de haber sido inducido al Salón de la Fama, volvió y generó mucha expectativa. Al final, el público vio ganador a Manny y abucheó cuando se pronunció el fallo.
La nostalgia de ver nuevamente a Pacquiao en el ring inundó el MGM, donde todo lo que hacía Manny era ovacionado, pero enfrente tenía a un rival complicado que respondió a los ataques del filipino. Pacquiao buscó hacer daño con golpes de poder de izquierda, y aunque intentó lanzar combinaciones a velocidad, no es la misma de hace años, pero conectó más que Barrios.
Barrios salió al asalto 12 obligado a noquear, derribarlo o hacer algo diferente, pero todo el tiempo que desaprovechó en la pelea fue determinante. Una derecha de Barrios al rostro del filipino tuvo pronta respuesta. Al final Barrios no pudo con Manny y el “Pacman” se veía ganador.
Pero dos de los jueces dieron empate y eso impidió que Manny hiciera historia, y que Barrios defendiera el cetro, pero ya se espera una revancha.
Tras el combate, Pacquiao dijo: “Estoy triste, yo creo que gané esa pelea, pero al final esto es boxeo, Entrené solo dos meses, seguiré entrenando 3 o 4 más para regresar, no creo que esto sea lo último para mí”.
El empate abre la puerta a una posible revancha, con Barrios buscando demostrar su supremacía y el icono filipino persiguiendo un noveno título mundial tras una actuación que demostró que lo último en irse es el boxeo.
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