La furia importadora, de abrigo: ni las camperas más baratas hacen la caja

La importación de indumentaria comienza a ganar terreno en comercios de la Ciudad. Desde el sector aseguran que es una medida para enfrentar los bajos niveles de ventas y de consumo. Preocupan las plataformas en línea

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Los productos importados comienzan a ganar terreno en los comercios de ropa de la Ciudad y las camperas de invierno suben al podio entre los de mayor ingreso, según le contaron a este diario en varias tiendas.

No obstante, en los comercios están expectantes por el ingreso, de China en una amplia mayoría, de más indumentaria.

La importación aparece como un negocio favorecido por el cambio de reglas en la política económica y un intento por levantar las ventas con precios más bajos pero -señalan desde el sector- parece no ser suficiente en un escenario donde el consumo no repunta.

“Del exterior, sólo ingresaron camperas. Después, se renovó de forma habitual”, contó la encargada de un comercio de 48, entre 8 y 9. “Renovamos las vidrieras con el cambio de estación pero los productos que ingresaron fueron los de siempre”, detalló la empleada de un comercio ubicado en la misma calle.

Lo cierto, es que sólo en algunos comercios ingresó ropa importada. En otros, afirmaron que los productos de la temporada de invierno son los habituales pero que no descartan vender ropa importada.

Valentín Gilitchensky, representante de la Federación de Empresarios de La Plata (Felp) y presidente del Centro Comercial Calle 8, expresó: “En cuanto a la indumentaria importada lo que más entró fue lo que es ropa de abrigo, especialmente las camperas”.

“Con la apertura de las importaciones, se facilitó el ingreso de estos productos provocando que en las vidrieras se ofrezca más variedad. También bajaron los precios a nivel local”, continuó el dirigente.

Para el representante, la importación de ropa “no afecta tanto a la industria textil y al comercio platense lo beneficia, porque ofrece mayor variedad y mejores precios para el cliente”, señaló.

En la línea de importados, se puede encontrar precios de 100 a 170 mil pesos por una campera de abrigo.

La importación de ropa como variante se desencadena en un escenario donde las ventas y el consumo exhibe números en rojo.

Según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), las ventas minoristas pyme cayeron 0,5 interanual y también se verificó un descenso del 6,7 por ciento en junio en relación al mes anterior.

Asimismo, casi un 30 por ciento de los comercios relevados afirmó que su situación empeoró, respecto al 2024. Específicamente, el rubro ‘Textil e indumentaria’ presentó una caída en junio del 4,7 por ciento internanual y 1,6 por ciento en comparación a mayo.

Lo cierto es que los números reflejan una situación evidente: en los comercios relevados por este diario, se observaron locales vacíos a pesar de exhibir diferentes promociones. Esto ocurre en el mes posterior al pago de aguinaldo a trabajadores en relación en dependencia y a ropa nueva en las vidrieras por el cambio de estación.

En este sentido, Gilitchensky advirtió: “Por más que los comercios ofrezcan mercadería importada, el problema es que no hay ventas. A pesar de que los precios no se muevan, la gente no está consumiendo”.

“A esto se suma el incremento de los impuestos y otros servicios, como el aumento de los sueldos”, agregó. “Lo cierto es que en este contexto, no se pueden crear nuevos puestos de trabajo ni más empleo, porque el comercio, al no tener ventas, no puede contratar nuevos empleados. Buscamos ser más competitivos, pero si el consumo no se restablece, es muy difícil”, concluyó.

LAS PLATAFORMAS PARA IMPORTAR

Con el objetivo de cuidar la producción interna, en Francia se aprobó un proyecto de ley cuyo objetivo es regular la importación de ropa de bajo costo.

Los principales destinatarios de la medida son las plataformas de origen chino ‘Shein’ y ‘Temu’ cuya presencia se agiganta a nivel mundial, incluso en Argentina.

En pocas palabras, estas plataformas de venta en línea ofrecen mercadería novedosa, bajos precios y el acceso a la misma en tan sólo pocos días.

Sin embargo, además de la calidad dudosa de la mercadería o de los cuestionamientos alrededor del origen de la producción en masa, uno de los grandes problemas que se analiza en el país es cómo puede competir el comercio local con los bajos precios que ofrecen estas plataformas.

“Entre el bajo consumo, el poder adquisitivo de la gente y la compra de ropa a través de estas páginas, es un combo que afecta al comercio local”, advirtió Valentín Gilitchensky. “Que la gente compre directamente afuera, está matando al comercio local”, cerró.

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