Fiscales también reclaman que la procuradora dé “un paso al costado”

Piden que Gils Carbó deje el cargo hasta que “se aclare la situación”

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El presidente de la Asociación de Fiscales y fiscal general de la Ciudad de Buenos Aires, Luis Cevasco, consideró que para apartar a la procuradora general de la nación Alejandra Gils Carbó de su cargo “hay que hacer un juicio político”, aunque pidió a la magistrada que “dé un paso al costado” hasta que “la situación se aclare”.

Cevasco se sumó así a las voces que piden el alejamiento de Gils Carbó de sus funciones para facilitar el avance de la causa que la investiga por la compra aparentemente irregular de un edificio para la Procuraduría. “Si se comprueban delitos cometidos por Gils Carbó por mal desempeño de las funciones puede ser removida por el procedimiento previsto en la ley que es el juicio político, y los poderes deben asumir la responsabilidad de llevarlo a cabo”, sostuvo el funcionario judicial.

Cevasco remarcó que se trata de un “tema de una alta gravedad institucional que se dicte un procesamiento contra un procurador general” porque “los fiscales que intervienen en ese caso de una manera u otra están vinculados a esa gestión, en este caso de Gils Carbó”. “Evidentemente lo que corresponde que hasta que la situación se aclare la procuradora de alguna manera dé un paso al costado para justamente preservar la pureza de la institución”, evaluó al referirse a la decisión del juez federal Julián Ercolini de procesar por fraude al Estado a la procuradora.

Este pedido se suma a los reiterados reclamos por parte del gobierno nacional para que la procuradora general renuncie a su cargo o haga uso de una licencia mientras se la investiga por supuesta corrupción en la compra de un edificio de la Procuración General.

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Por su parte, la candidata a diputada por Cambiemos, Elisa Carrió, también insistió con que Gils Carbó “debería renunciar” porque “la corrupción está comprobada”.

Si bien indicó que “el mecanismo de juicio político no está contemplado en la Constitución” dijo que “tampoco se la puede sacar por decreto”, por lo que instó a la Cámara de Diputados para que resuelva “cuál es el mecanismo de destitución. Y mientras tanto ella que siga en su cargo”.

Además, el ministro de Justicia, Germán Garavano, se pronunció nuevamente a favor de que la jefa de los fiscales “se tome licencia” hasta que se resuelva su situación judicial, mientras legisladores de la coalición oficialista Cambiemos comenzaron a presionar con el pedido de juicio político. La posición del Gobierno fue respaldada por los macristas Pablo Tonelli, miembro del oficialismo en el Consejo de la Magistratura, y Silvia Lospennato, segunda en la comisión bicameral de Seguimiento del Ministerio Público, mientras que el radical Mario Negri evaluó que el juicio político contra la procuradora “es inevitable”.

En medio de la pulseada entre el Gobierno y la procuradora, Garavano admitió que el reclamo oficial “no es una cuestión política partidaria sino institucional” porque el procesamiento de Gils Carbó “crea por primera vez en el país una situación de crisis institucional en cabeza de quien debiera ser garante de la persecución penal y la Justicia en la Argentina”. Asimismo, insistió en que “la licencia de la procuradora generaría una tranquilidad en los fiscales que están investigando y que tienen que intervenir en el caso, y le permitiría a ella enfrentar con más tranquilidad esta situación”.

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