“Hay que trabajar también con los observadores pasivos”

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El bullying se ocasiona en un ámbito en el que intervienen, además del agredido y el agresor, otros chicos que hacen sentir poderoso al que agrede por el simple hecho de ser observado. Entre los chicos que observan, hay algunos que activamente apoyan al que acosa y otros que rechazan las agresiones. Pero es importante destacar que todo niño involucrado en un episodio de violencia, sea cual fuere su papel en él, está en una situación de inseguridad y necesita del apoyo adulto para forjar habilidades positivas y relaciones saludables. Muchos que observan los ataques no saben cómo defender o defenderse. Y de este modo, sin quererlo, toman el rol de “público espectador” que apoya pasivamente la situación.

 

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