Denuncias cruzadas: definirá la Procuración

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La Procuración General de la Suprema Corte bonaerense analizará desde la semana entrante la causa que se abrió tras la denuncia que formuló ante el fiscal Jorge Paolini una ex empleada del juzgado de Garantías 1 de La Plata, quien aseguró que su titular, Guillermo Atencio, “le hizo pedir” una suma millonaria a los imputados en una causa por presunta defraudación a IOMA, para evitar que fueran presos.

El magistrado, por su parte, elevó a la Procuración un fuerte descargo en el que aclaró que esta mujer, identificada como Paola Alayo, fue designada en su juzgado “por determinación de la Suprema Corte”; que “estaba imputada” en otra causa “por tentativa de estafa” contra IOMA (que también investigaba Paolini), ya que antes de convertirse en su empleada “había sido proveedora” de ese organismo; que ella le “hizo saber” que los imputados en la causa que él tramitaba “estarían dispuestos a entregar una suma de dinero a cambio de un beneficio”, oferta que él rechazó, y que a principios de diciembre la desafectaron de su juzgado a instancias suyas, luego de que una cámara de esa dependencia la filmó “tomando indebidamente conocimiento del proyecto de rechazo del requerimiento de detención presentado por el dr. Paolini (ver captura de video)”.

Paolini elevó la denuncia ante el fiscal general Héctor Vogliolo, quien, a su vez, la remitió a la fiscalía que estaba en turno en ese momento, a cargo de Marcelo Martini. Fuentes judiciales explicaron que este funcionario “se excusó de seguir actuando por una cuestión de amistad con el denunciado”, el juez Jorge Moya Panisello hizo lugar al planteo y la causa recayó en la fiscalía de Marcelo Romero.

Sin embargo, según pudo saber este diario, el expediente volvió a la Fiscalía General, que ya lo remitió a la Procuración para que resuelva si continúa la investigación en el Departamento Judicial La Plata o se deriva a otro, explicaron ayer desde ese organismo.

La denunciante aseguró que el supuesto pedido de coimas “rondaría el millón y medio de dólares”. Y, Atencio ante la Procuración, que “no puede escapar al sano criterio del menos advertido” que el relato de Alayo “resulta absurdo e inverosímil”.

 

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