La Quinta del Pincha dio todo en la final, pero no pudo en los penales

Estudiantes no logró romper el cero en el marcador a pesar de jugar con uno más en el tiempo extra. Kovacic, el arquero pirata, la figura

Edición Impresa

La Quinta de Estudiantes dejó todo ayer en la final de la Superliga Juvenil ante Belgrano pero, tras empatar 0-0 en los 90 minutos reglamentarios y el tiempo extra, perdió por 4-3 en la tanda de los penales. El equipo comandado por Gustavo Salinas jugó el suplementario con un hombre de más pero no pudo vencer la valla defendida por Luis Kovacic, la gran figura del partido.

El encuentro se disputó en Rosario, más precisamente en el predio Bella Vista de Newell’s, y la categoría 2000 albirroja estuvo acompañada por una importante delegación compuesta por dirigentes (entre ellos, Juan Sebastián Verón), entrenadores del fútbol juvenil, jugadores de otras categorías y familiares. Nadie se quiso perder de la final.

Durante los primeros 45 minutos la paridad reinó en el partido y, por eso, a nadie le sorprendió que se vayan empatando en cero al vestuario. Pero en el complemento el Pincha empezó a mostrarse más agresivo y comenzó a inquietar al arquero de Belgrano, que sería decisivo minutos más tarde. Cuando se estaban por terminar los 90 minutos reglamentarios, los cordobeses se quedaron con uno menos por la expulsión de Nicolás Meriano.

Con un jugador más, Estudiantes salió decidido en el tiempo suplementario a quedarse con la final pero se encontró con Kovacic bajo los tres palos. El Pirata logró acomodarse recién en el segundo tiempo extra y sufrió menos, aunque igualmente los jugadores albirrojos fueron quienes generaron las situaciones más claras de gol. Como el 0-0 no se movió del marcador, el campeón tuvo que definirse en los penales.

Belgrano, gracias a los penales atajados por su arquero a Mateo Palmieri y Aaron Spetale, se quedó con la serie por 4-3 y dio la vuelta olímpica. Iñaki Ludueña, el “uno” pincharrata, contuvo uno de los tiros (curiosamente a Kovacic) pero no fue suficiente.

Tras el encuentro, y luego de la ceremonia de premiación organizada por la Superliga, ambos planteles almorzaron juntos en el predio de Newell’s dejando un claro mensaje de paz y juego limpio.

 

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE