Una “multitud” de policías en la esquina del ataque a Boca

La intercepción de Libertador y Lidoro Quinteros, esquina en la cual se desencadenó el ataque al micro que trasladaba a la delegación de Boca en oportunidad de la final de la Copa Libertadores, la cual terminó postergada 24 horas, y después reprogramada para el domingo que viene en Madrid, resultó uno de los focos de atención en la previa del River-Gimnasia de ayer.

¿Y que se vio? La postal fue que casi un centenar de uniformados se hicieron cargo de la seguridad en esa zona tres horas antes de la programada para el comienzo. Una multitud, verdaderamente, considerando que en aquella previa de River-Boca, la guardia no pasó de los 20 efectivos.

Obvio que no pasó nada, y la delegación del Lobo pasó como si nada, lo que debió haber sucedido aquella vergonzosa tarde en la que una lluvia de proyectiles golpeó al micro de Boca, causándole heridas a varios jugadores y determinando un clima que nadie hubiera imaginado, con la consecuencia inédita de que la Conmebol trasladara la final a Europa.

Más allá de las causas que merecieron un sinfín de interpretaciones, entre aquel referido ataque y este recargado operativo de ayer, sucedieron cosas, como la renuncia de Martín Ocampo a su cargo de ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires.

Otra variante fue que a la fuerza encargada de controlar el anillo perimetral del estadio de Nuñez no fue Prefectura y Gendarmería, sino la Policía de la Ciudad de Buenos Aires.

EL PARAGUAYO AYALA AFUERA DEL BANCO Y CONCENTRADO

Como es costumbre del cuerpo técnico albiazul para cada partido, convocó 19 futbolistas para afrontar el partido con River, por lo que uno debía quedar afuera del banco. Y en esta oportunidad no hubo dudas para Troglio, ya que el número 19 fue Víctor Ayala, algo que estaba decidido de antemano que quedara fuera del banco. El paraguayo va a ser titular el jueves en la final, pero el DT decidió hacerlo concentrar igual, y ayer por la mañana incluso entrenó con el grupo que jugará la Copa.

SE VIENE EL CIERRE DEL AÑO DE LOCAL ANTE HURACÁN

Más allá que toda la atención en el Lobo está centrada en la final de la Copa Argentina, tras ese partido, la delegación deberá regresar para encarar el último partido de 2018, que será por la 15ª fecha de la Súperliga. En principio, el partido con Huracán está pautado para el domingo 17:10 en el bosque, aunque desde el Lobo quieren pasarlo para el lunes 10. La Reserva iría el domingo en horas de la mañana.