Para Londres, es “altamente probable” que el Kremlin esté detrás del ataque al ex espía

Lo dijo la premier británica Theresa May. EE UU la respaldó. El gas nervioso con el que intentaron matar a Skripal se fabrica en Rusia

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LONDRES

La primera ministra británica, Theresa May, afirmó ayer que es “muy probable” que Rusia esté tras el intento de asesinar a un ex espía ruso y le dio un día para explicarse. Las acusaciones fueron tildadas de “espectáculo circense” y “provocación” por Moscú.

“Es muy probable que Rusia fuera responsable del acto” contra Serguei Skripal y su hija Yulia, heridos de gravedad en la ciudad inglesa de Salisbury con un gas nervioso que, dijo May, es de tipo militar y se fabrica en Rusia.

En este marco, el secretario de Estado norteamericano, Rex Tillerson, se pronunció en sintonía con May y dijo tener “plena confianza” en la conclusión a la que llegó el Reino Unido.

La primera ministra dio hasta hoy a Moscú para aclarar si usó el arma o cayó en manos de alguien y para dar explicaciones a la Organización para la prohibición de armas químicas. “Hay sólo dos explicaciones plausibles sobre lo que ocurrió en Salisbury el 4 de marzo: o fue un acto directo del Estado ruso contra nuestro país, o el gobierno ruso perdió control de este agente nervioso potencial y catastróficamente dañino”, dijo May a la Cámara de los Comunes.

May señaló que el arma usada contra Skripal, un ex coronel ruso de 66 años condenado en su país por alta traición, y su hija “es un agente nervioso de grado militar desarrollado por Rusia”, los gases conocidos como “Novichok”. La premier citó el historial de Rusia “en llevar a cabo asesinatos organizados por el Estado” y el hecho de que vea “a algunos desertores como blancos legítimos”, para concluir la muy probable responsabilidad del país que preside Vladimir Putin.

El canciller Boris Johnson pidió al embajador ruso en Londres que “proporcione inmediatamente una información total y completa del programa Novichok a la Organización para la Prohibición de Armas Químicas”, según May, dándole plazo hasta hoy.

Las afirmaciones de May prometen aumentar la tensión con Moscú y estuvieron precedidas de una advertencia de la embajada rusa, que le aconsejó no librarse a un “juego peligroso” que pone en riesgo las relaciones bilaterales. “Esto es un espectáculo circense en el Parlamento británico” y “una provocación”, dijo tras la intervención de May, la portavoz de la diplomacia rusa, Maria Zajarova. Skripal y su hija siguen graves en el hospital. (AFP)

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