Encuentro a solas entre la Gobernadora y Stolbizer
Edición Impresa | 16 de Marzo de 2018 | 02:26
Por MARIANO PEREZ DE EULATE
mpeulate@eldia.com
La gobernadora María Eugenia Vidal y la dirigente opositora Margarita Stolbizer se reunieron en secreto la semana pasada. Según fuentes de Cambiemos, el encuentro se desarrolló en la casa que la mandataria habita en la base área de Morón, garantía de reserva. Un sinfín de especulaciones circulan desde entonces tanto en el oficialismo como en el GEN, el partido de la ex diputada que parece cada vez más alejado de la alianza electoral que formó el año pasado con el Frente Renovador de Sergio Massa.
Las versiones recogidas por este diario en fuentes vinculadas a las dos mujeres apuntan a dos posibles ofrecimientos que la gobernadora le habría hecho a quien fuera candidata a senadora nacional por la Provincia en octubre pasado.
Uno: suena bastante en Cambiemos, en especial en despachos legislativos como el del titular de la Cámara de Diputados provincial Manuel Mosca, que a la gobernadora le gustaría ver a Stolbizer como futura jueza de la Suprema Corte de Justicia bonaerense, donde hay un par de vacantes a llenar.
Vidal ha dicho en la intimidad que, en efecto, desearía proponer a una mujer para el alto tribunal, aunque nunca adelantó nombres. Fuentes oficialistas aseguran que el ofrecimiento a Margarita no habría implicado, por parte de la gobernadora, un pedido de alineamiento político de la líder del GEN con Cambiemos ante eventuales futuras cuestiones judiciales que involucren al partido de gobierno.
Para Vidal sería una jugada casi maestra: nadie puede tildar a Stolbizer de ser una dirigente cercana al oficialismo. Las dos mujeres mantienen una relación personal muy buena pero la ex diputada es muy crítica, sobre todo, del gobierno nacional que lidera el presidente Mauricio Macri.
Sin embargo, quienes conocen a Margarita aseguran que no la ven siguiendo los muy cansinos tiempos que implica el trabajo de ser uno de los “supremos”.
Dos: sabiendo que Margarita jamás aceptaría ser ministra provincial, Vidal le habría ofrecido encabezar una suerte de “mesa de notables” de la Provincia –a crearse- que se abocaría a elaborar propuestas para reformular temas sensibles. Como por ejemplo, la lógica del sistema educativo bonaerense o la cuestión del Poder Judicial. Acaso eso seduzca más a la líder del GEN y le permita mantener su identidad partidaria.
Para Vidal, sumar a Stolbizer a sus filas es casi una obsesión. Son vecinas de Morón y se respetan mutuamente. En Cambiemos admiten que la gobernadora hubiera visto con muy buenos que Margarita fuera candidata del oficialismo en las elecciones legislativas del año pasado. Las unía, claro, la visión lapidaria sobre la década kirchnerista. Algunas fuentes, incluso, aseguran que hubo un ofrecimiento formal para postularla al Senado, en la dupla principal que terminaron integrando Esteban Bullrich y Gladys González. Nunca fue admitido en público por ninguna de las dos protagonistas.
Margarita, se sabe, privilegió su alianza con el peronista disidente Massa, pensando en que juntos llegarían a sacar un mínimo de 20 puntos porcentuales. Al final, apenas arañaron el 11 por ciento. Al otro día del comicio, esa sociedad comenzó a deshilacharse, aunque formalmente nunca se anunció ninguna ruptura. Acaso dependa del grado de acercamiento del de Tigre con el Justicialismo.
Lo dicho: con Vidal, Stolbizer tiene sintonía. En rigor, sus resquemores respecto al oficialismo tendrían dos nombres propios. El del propio Macri y, claro, el de la titular de la Coalición Cívica. Elisa Carrió, una de las patas fundamentales de la alianza gobernante. No se llevan bien esas dos señoras, aunque en el pasado supieron estar relativamente cerca.
Sabiendo esto, justamente lo que le propondría Vidal a Margarita es un esquema de convivencia en el oficialismo que no la obligue a interactuar ni con el Presidente ni con Lilita. La gobernadora se recibiría, así, de experta en malabares.
Un dato no menor, con el que especulan en Cambiemos, es que Stolbizer tendría bastante presión de su tropa provincial para explorar algún tipo de acercamiento político al gobierno vidalista. Se entiende: dado el magro resultado de octubre pasado, el GEN se ha quedado afuera de todo. No tiene diputados, no tiene senadores, conserva algún concejal. Y, para colmo, muchos laderos de Margarita sienten cierta cercanía con actores radicales de Cambiemos. Es que, en definitiva, el centenario partido aparece como el lugar de origen de la mayoría de los dirigentes que todavía acompañan a la ex diputada de Morón.
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