El fiscal pidió la máxima pena para el acusado por el crimen de su novia

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“La muerte de cualquier hombre me empequeñece, pues estoy en la maraña de la humanidad. En consecuencia, no envíes nunca a preguntar por quién doblan las campanas: doblan por ti”.

Con este fragmento del poema de John Donne que le dio nombre a la novela de Ernest Hemingway arrancó ayer su alegato el fiscal Marcelo Romero, quien pidió que David Ruiz (27) sea condenado a la pena de reclusión perpetua por el homicidio calificado de su novia Brenda Irusta (17).

Fundó su reclamo de la pena máxima en el vínculo con la víctima y el antecedente condenatorio del acusado por una tentativa de homicidio en ocasión de robo, informaron fuentes judiciales.

A su turno, el defensor Ricardo Fuentes solicitó la absolución de Ruiz al sostener que la fiscalía “no pudo probar ninguno de sus planteos” y refutó con consideraciones técnicas el argumento legal de la reincidencia, ampliaron los mismos voceros.

Por último, Ruiz hizo uso de su derecho a formular las últimas palabras para decir: “Yo no maté a nadie. Fue un accidente y hace cinco años que estoy preso por esto”.

Brenda fue hallada sin vida el 30 de septiembre de 2013 en la casa que compartía con Ruiz en 515 entre 10 y 11, con una herida de bala a la altura de la sien izquierda. Ella era diestra, pero los peritos no hallaron huellas de su pareja en el arma homicida, ni deflagración de pólvora en sus manos o ropa.

Fuentes judiciales explicaron que el tipo de arma utilizada- una pistola 22- por su calibre pequeño y ser encapsulada, suele no dejar restos de pólvora en quien la acciona.

El Tribunal Oral 5 dará a conocer el veredicto el próximo 21 de agosto, a las 13.

“MÁS FUERTES QUE NUNCA”

“Tenemos expectativas, pero ahora todo depende de los jueces”, dijo ayer a este diario Vanesa Irusta, hermana de Brenda, quien reconoció que toda la familia tiene “sentimientos encontrados”.

“Nos dio mucha angustia revivir todo lo que realmente pasó”, dijo, refiriéndose puntualmente a un dato que conocieron en el juicio: “Nos shockeó saber que antes del disparo Brenda recibió un golpe fuerte en la cabeza con algo duro, como un fierro, la desvaneció”, explicó.

Desde la fiscalía explicaron que, a criterio de los forenses, ese golpe no fue mortal pero tuvo entidad suficiente para desmayar a la víctima.

Vanesa es la mayor de tres hermanas (Brenda era la del medio) y espera que “se haga justicia para que su alma pueda descansar en paz”.

Comentó que su madre está “hecha pedazos. Se fue muriendo junto con Brenda”, pese a que es una mujer de 56 años.

“Esto nos destruyó -insistió Vanesa- pero estamos más fuertes que nunca”.

A lo largo del debate varios allegados a la víctima declararon estar al tanto de que atravesaba una relación “complicada y violenta” con el acusado. La defensa se mantuvo firme en su argumento de que fue un accidente. El tribunal tiene la última palabra.

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