Series históricas: el pasado copa la tevé

Las plataformas on demand incluyen en sus catálogos cada vez más shows basados en hechos o personajes reales, con los que además de entretenerse se aprende

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Netflix, HBO, Amazon Video y otras plataformas incluyen en sus catálogos cada vez más producciones basadas en hechos o personajes reales. Dicen los historiadores que, si están bien guionadas, y en muchos casos juega fuerte la imaginación, son una buena alternativa para que el público se interese por acontecimientos históricos con los que, además de entretenerse, el público puede sentir el bichito del interés y abrirse luego a un conocimiento más profundo sobre la Historia.

Entre las apuestas de Amazon Video para competir con HBO y Netflix se encuentra una de las series más caras, ambiciosas y arriesgadas del año. Se estrena en la plataforma a fin de mes y su protagonista es Óscar Jaenada (el padre de Luismi en la serie de Netflix). Se trata de una serie de temática histórica y se llama “Hernán”.

Las series históricas pueden ser la puerta a la que los espectadores se abran al pasado

 

La esperada producción tiene ocho episodios y quiere contar la llegada de Hernán Cortés y sus tropas a México, desde el punto de vista de ocho de los protagonistas: el propio Cortés, La Malinche, Moctezuma, Xicohténcatl, Bernal Díaz del Castillo, Gonzalo Sandoval, Pedro Alvarado y Cristóbal de Olid.

“Hernán” es, por ahora, la última de la lista de ficciones de esta temática que se presentan al público.

“The Last Kingdom” (Netflix), “Versailles” (Netflix), “The Crown” (Netflix), “Outlander” (Fox), “Frontier” (Netflix), “Las chicas del cable” (Netflix), “Vikings” (Fox), “Catherine, The Great” (HBO), “Downton Abbey” (Netflix), “Los Medici” (Netflix), “Isabel” (HBO), “Sons of liberty” (History), “Chernobyl” (HBO), “Poldark” (Netflix), o “El Ministerio del Tiempo” (Netflix) son algunos de los precedentes.

Pero no todas son iguales, ya que cada una trata la historia en diferentes formas y estilos.

“The Crown”, por ejemplo, relata una época a través de Isabel II y del resto de la familia real británica.

Al igual que “Catherine, The Great”, con Helen Mirren dando vida a la monarca que gobernó el imperio ruso.

Por otro lado, otras series han querido acercar hechos puntuales del pasado, como es el caso de “Chernobyl”.

Esta producción ha sido una de las más alabadas del año y cuenta, con gran realismo y fiel al relato, el accidente nuclear que tuvo lugar en la central Vladímir Ilich Lenin, en Ucrania, en 1986.

Otras tiran de imaginación para pasearse por la historia y darla a conocer, como “El Ministerio del Tiempo”.

Esta serie comenzó su aventura en la televisión pública española (RTVE) y, después, llegó a un acuerdo con Netflix, por lo que también está disponible para un público más amplio.

Como se desprende de su nombre, la serie trata el tema de los viajes en el tiempo a través de un ministerio oficial, pero secreto, encargado de mantener la historia tal y como la conocemos.

Así, los protagonistas luchan contra los nazis, ayudan a que el cuadro de Picasso “El Guernica” vuelva a España tras la dictadura o salvan a Simón Bolívar de ser asesinado. La cuarta temporada está en marcha.

UNA MANERA DE GENERAR INTERÉS

Siempre que se reproduce algún hecho que sucedió en el pasado surge la preocupación por cómo se trata el tema, si es fiel a la realidad o si lleva a equivocaciones.

Las series de temática histórica van más allá del entretenimiento ya que puede ser la puerta a la que los espectadores se abran al pasado.

“Me parece muy bien que se hagan”, dice Carlos Sanz, historiador y profesor de Historia Contemporánea.

“Responden al interés del público por la historia y ayudan a difundirla. En muchos casos generan además afición y deseos de aprender más”, añade.

En su opinión profesional, Sanz cree que estos productos ayudan a aumentar el interés general por la historia “si están bien asesoradas y realizadas, con un mínimo de rigor, no tienen por qué dar una imagen alterada del pasado”, explica.

Los medios de producción disponibles permiten realizar este tipo de series de una manera más fidedigna y atractiva para el gran público que, generalmente, suele calar más que los documentales.

Amazon Video estrenará a fin de mes su ambiciosa y esperada serie sobre Hernán Cortés

 

Tienen un ritmo diferente y caras reconocidas que pueden ser un gancho para el espectador.

Normalmente, los hechos históricos vienen acompañados de otras tramas o son dramatizados.

Las series, aunque de temática histórica, no deja de ser ficción.

“Siempre hay un elemento de simplificación y énfasis en determinados elementos para aumentar el atractivo de la historia o los personajes, pero hay que entender que una serie no es una monografía o un artículo académico”, dice Sanz al respecto.

La oferta en la actualidad es rica y variada, por lo que no hay excusa para no adentrarse en la aventura del pasado.

 

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