La huelga del transporte en Francia, camino a superar todos los récords

PARÍS

La huelga en los ferrocarriles franceses y el transporte metropolitano de París contra la reforma jubilatoria, que empezó el 5 de diciembre, ha comenzado ya a superar registros históricos y amenaza con instaurar un nuevo récord de duración.

Tras 25 días de paro, que se cumplieron ayer, ya se han sobrepasado las 22 jornadas de duración de las movilizaciones que hubo en 1995 también contra una reforma previsional que en aquella ocasión fue retirada por el entonces primer ministro, el conservador Alain Juppé (mentor del actual premier Édouard Philippe).

Juppé tuvo que doblegarse entonces ante una opinión pública que se oponía a sus planes de suprimir los regímenes especiales de jubilaciones bajo la presión de los millones de personas que, como ahora, veían perturbados sus desplazamientos cotidianos por el paro del transporte.

En la Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF), hay otras dos huelgas que son también referencia por haberse prolongado más tiempo todavía. Una entre diciembre de 1986 y enero de 1987 de 29 días contra cambios en los salarios; y otra en 2018 contra la supresión del estatuto laboral propio de la empresa, que se prolongó durante 36 jornadas, aunque de forma discontinua.

El Gobierno del presidente Emmanuel Macron ha presionado, sin éxito, a los huelguistas para que suspendieran los paros durante las vacaciones de Navidad con el fin de dar una tregua a los franceses que viajan en estas fechas para visitar a sus familias.

Sin embargo, tampoco ha mostrado apuro para abrir una nueva ronda de negociaciones. El primer ministro Philippe anunció que esa ronda comenzará el 7 de enero, es decir una vez que hayan finalizado las vacaciones y a dos días de una nueva jornada de marchas nacionales convocada por los sindicatos. Entre los maquinistas, sector clave para que los trenes funcionen, la tasa de acatamiento actual al paro es del 42 por ciento (al inicio de la protesta el 5 de diciembre, era de 85,7 por ciento). (EFE)