Murió el ladrón que había sido golpeado con un fierro en asalto

Un hombre de 38 años, que el último 26 de enero fue sorprendido por los vecinos mientras asaltaba un kiosco en el centro berissense, falleció el lunes a la mañana y ahora se investiga si fue por heridas que recibió al ser reducido por los testigos del hecho.

De acuerdo a lo informado por fuentes oficiales, el sujeto, identificado como Jorge Centurión, permanecía internado en el hospital San Martín donde, a pesar de recibir asistencia médica, sucumbió a causa de la severa lesión que le causó el impacto de una varilla de metal en el cráneo. Ese hecho se produjo durante la madrugada de aquel sábado en un maxikiosco situado en avenida Montevideo entre 21 y 22. El asaltante ingresó en el local y se acercó al empleado.

Según los testimonios obtenidos por EL DIA en aquella oportunidad, “apenas el ladrón ingresó al comercio, agarró del cuello al chico que estaba para la atención al público y para asustarlo le apoyó algo con punta”. El mismo frentista añadió que “al parecer, este empleado gritó y su amigo que estaba en la puerta fumando lo escuchó y lo vio en esa situación. Entonces, tomó una varilla metálica y golpeó al asaltante en la espalda”.

El declarante sostuvo luego que “el ladrón terminó con una herida en la cabeza, que no sabemos si la sufrió porque con la punta de la varilla le provocó el corte o si fue al caer y pegar su cabeza con el piso”.

Minutos más tarde la Policía arribó al lugar y, tras palpar al herido, halló un alicate, que sería el elemento con el que amenazó al empleado.

Por otra parte, voceros de la investigación revelaron que “antes de meterse en el maxikiosco, este mismo hombre quiso robar un auto en la esquina de Montevideo y 28. Se subió a ese coche pese a que estaba una chica en su interior, pero fue sorprendido por el novio de la joven y escapó de la escena, tras lo cual se subió a un taxi. La pareja lo persiguió por un tiempo, pero no consiguió atraparlo.

Después del “fierrazo” que lo dejó seminconsciente, una ambulancia lo trasladó, primero, al hospital Larrain.

Luego, a causa de las lesiones, fue derivado al San Martín. Allí lo operaron a raíz de la fractura en la cabeza y permanecía en terapia intensiva hasta su deceso.

La causa ahora fue caratulada como “averiguación por causales de muerte”.