El Congreso le baja el pulgar a la idea de eliminar las PASO

Mariano Spezzapria

@mnspezzapria

El Congreso clausuró ayer la posibilidad de debatir la suspensión de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) luego de que un sector de la alianza gobernante avanzara con varios proyectos para que los comicios nacionales se realicen directamente en octubre, sin escala previa el 11 de agosto, como establece el calendario electoral de este año.

El pronunciamiento parlamentario fue contundente en términos políticos: el flamante titular de bloque del PJ en el Senado, Carlos Caserio, anticipó su rechazo a la iniciativa, mientras que en la Cámara de Diputados fue Pablo Tonelli, titular de la comisión de Asuntos Constitucionales y miembro del PRO, quien advirtió que no es conveniente “cambiar ahora las reglas de juego”.

Según pudo saber EL DIA de fuentes parlamentarias, para modificar la legislación electoral hace falta una mayoría especial de 37 senadores y 129 diputados, con lo cual sería imposible para la alianza Cambiemos (ahora Juntos por el Cambio) sancionar la eliminación de las PASO sin el concurso de un sector de la oposición. En el propio oficialismo no hay acuerdo al respecto.

De hecho, el senador peronista y compañero de fórmula del presidente Mauricio Macri, Miguel Pichetto, se pronunció ayer en contra de la posibilidad de eliminar las PASO, tal como propuso el titular de la UCR, Alfredo Cornejo. “La ley debería haber sido modificada con anterioridad. Ahora lo veo complejo y además creo que las reglas de juego están para cumplirse”, afirmó Pichetto.

Dentro del oficialismo, tampoco el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, estuvo de acuerdo en la eliminación de las PASO en medio del año electoral, aunque el presidente Macri dejó correr la iniciativa de Cornejo tras una reunión de Gabinete que encabezó el lunes pasado en la Casa Rosada. Un ministro que participó de esa reunión lo admitió en un diálogo fuera de micrófono.

La tesis de Cornejo, actual gobernador de Mendoza, es que como ninguna de las siete alianzas que inscribieron fórmula presidencial competirá realmente en una interna, entonces no tiene sentido que el Estado nacional gaste 4.300 millones de pesos para organizar y realizar las PASO el domingo 11 de agosto. Pero en el Gobierno también hay un motivo no confeso, de orden económico.

En la Casa Rosada y en otras dependencias gubernamentales se advierte que si la fórmula Macri-Pichetto perdiera las PASO con la dupla del Frente de Todos Alberto Fernández-Cristina Kirchner en forma contundente, los mercados reaccionarían negativamente y podría llegar a su fin la estabilidad cambiaria que hace un par de meses se consiguió con ayuda del Fondo Monetario.

Se trata de una disyuntiva para el Gobierno, porque si el presidente Macri conserva alguna posibilidad de conseguir la reelección, ésta se diluirá en un escenario de inestabilidad cambiaria, con el dólar en la tapa de los diarios. Si las PASO fueran eliminadas, la alianza gobernante más tiempo para propiciar una recuperación de la economía en términos de consumo popular.

El presidente Macri no desestimó estos argumentos en la reunión de Gabinete posterior al fin de semana en el que se formalizaron las candidaturas para las elecciones nacionales. El mismo sábado en que se estaban cerrando las listas, voceros oficiosos subrayaban la “inutilidad de las PASO”, anticipando de alguna manera una movida política que se cristalizó el lunes pasado.

Ese día estuvo Cornejo en la Casa Rosada y avanzó con la iniciativa. El gobernador de Mendoza blanqueó luego su propuesta para eliminar las PASO con una serie de tuits.

La movida se completó con la presentación de proyectos de ley. Uno de ellos estuvo a cargo del radical mendocino Luis Petri y otra iniciativa similar fue presentada por la jujeña Gabriela Burgos, también de la UCR. En ambos proyectos se prevé la eliminación del artículo 19 de la ley que instrumentó las PASO, para quitar la obligatoriedad de realizar la interna cuando no haya competencia entre distintos candidatos a quedarse con una misma postulación.

Otro proyecto en la misma línea fue presentado por la diputada oficialista Graciela Ocaña. En la Legislatura bonaerense, en tanto, senadores radicales de Cambiemos presentaron una iniciativa para modificar el artículo 1 de la Ley 14.086 sobre las primarias.

Uno de los autores del proyecto, Marcelo Di Leo, sostuvo que es “inadmisible que el Estado tenga que gastar miles de millones de pesos para realizar solamente una gran encuesta, movilizando a toda la ciudadanía para que participe de un acto eleccionario que no es tal”.

Pero el fiscal electoral Jorge Di Lello dijo que las PASO “se tienen que hacer” y entre los candidatos presidenciales, Roberto Lavagna se preguntó “qué se puede pensar de quienes a mitad del juego pretenden un cambio de reglas”.