La vida de lujos de un ex director de Educación que está preso y en silencio

Néstor Osvaldo Casado, el ex funcionario de la Dirección General de Cultura y Educación (DGCyE) bonaerense que con un sueldo de poco más de 40 mil pesos se las arreglaba para viajar con regularidad a Miami, vaciar los shopping malls y despuntar el gusto por los vehículos caros, ayer guardó silencio al ser indagado por “asociación ilícita y malversación de caudales públicos”.

Según fuentes judiciales, se negó a declarar ante la fiscal Cecilia Corfield - que reemplaza a su par Juan Cruz Condomí Alcorta, ahora de licencia- y seguirá detenido, situación en la que quedó el viernes después de que la Sala III de la Cámara Penal rechazó una apelación de su defensa contra la denegatoria de eximición de prisión. Resta resolver un planteo similar que presentó la defensa de Horacio Mancowski (subdirector de Transporte Terrestre de la DGCyE), que, por ahora, sigue libre, mientras que ya tienen preventiva otros dos funcionarios del organismo imputados en la misma causa, Gustavo Chiramberro y Diego Burgos, y Walter Cejas.

Este último es el “playero” de la estación de servicio de 44 y 31 que a fines de abril fue sorprendido en un operativo de control de rutina, en una camioneta 4 X 4, nervioso y con 15 tarjetas de débito de la cartera educativa. Cejas había sido novio de la hija de Casado, una joven que gusta ( o gustaba) de reportar en sus redes sociales la vida de lujos de toda su familia, fotos que -hay que decirlo- fueron de gran ayuda en la causa.

Los instructores encabezados por Condomí Alcorta empezaron a tirar del hilo hasta determinar que, en principio, con el fraude sistemático en la carga de combustible a los autos oficiales de esa cartera se habrían quedado, en pocos años, con más de 25 millones de pesos del Estado Provincial.

Pero la red de la banda no se habría agotado en eso, aceitada como estaba la maniobra con testaferros que presuntamente transformaban el flujo de dinero en bienes que tenían, además del disfrute, fines comerciales y hasta un servicio de seguridad encargado de custodiar el movimiento de fondos.

“Esta investigación recién empieza”, cerró, enigmático, un investigador al que este diario consultó en las últimas horas.

La pesquisa avanza ahora hacia otros funcionarios y personajes cercanos que habrían prestado colaboración para defraudar a las arcas públicas con la compra de insumos para Educación.

Por lo pronto, quedó en la mira una agencia de autos situada en 31 y 43, que fue allanada el mes pasado y donde se encontró, entre otras cosas, un Citroën DS 3 rojo que apareció en fotos familiares de Casado. “A fines de noviembre se lo regaló a la mujer para el cumpleaños. Lo usó dos meses y lo puso a la venta. En las declaraciones testimoniales que se tomaron en la agencia, primero decían que no tenían nada que ver pero después reconocieron que el tipo trajo el auto porque le andaba mal el motor”, dijo un investigador, apuntando que en 2014 Casado le había regalado su mujer una camioneta negra, para homenajearla por el Día de la Madre. De nuevo, la historia está contada en los posteos de Instagram de la hija.

En seis allanamientos previos, que acompañaron las detenciones de los jefes de departamento de Educación (Chiramberro y Burgos) fueron secuestrados 19 autos y camionetas, motos, una lancha tipo yate, cuatriciclos y motos de agua, varios de los cuales estaban en la agencia de La Loma.

Hay “elementos suficientes” para sospechar “que desde fecha indeterminada y al menos hasta el 24 de abril de 2019, al menos un hombre, coactuando al efecto con al menos otros cuatro, funcionarios de la DGCyE, utilizaron en propio beneficio y en reiteradas oportunidades varias tarjetas de débito que le fueron otorgadas por el Banco Provincia al área de Administración antes nombrada, las cuales eran recargadas con fondos públicos, haciendo falsas compras de combustible, pero extrayendo dinero a cambio”, se explicó.

Se detalla en la acusación que se habrían utilizado unas 600 tarjetas para cargar combustible, “aportadas en conjunto por los miembros que las administraban en el organismo estatal y que eran responsables directos del control y rendición de cuentas de los montos no solo asignados a combustibles”.

Además de la investigación judicial, la cartera educativa inició una serie de sumarios ante la sospecha de que puede haber más empleados involucrados en la maniobra.

Las fuentes sospechan que en la malversación podrían estar involucrados también otros empleados de la estación de servicio, ya que un día después de la detención de Cejas se suicidó el encargado general de ese comercio, Maximiliano Normann, de 44 años.