Hallan sangre en la ropa del acusado de la masacre

Losperitajes realizados a la ropa secuestrada en la pieza del acusado, en el marco de la causa que investiga el triple crimen de Melchor Romero, arrojó como resultado que tenía manchas de sangre.

Así lo revelaron ayer fuentes judiciales, quienes precisaron que ahora se harán pruebas de cotejo de ADN para establecer si esos rastros hemáticos pertenecen a alguna de las víctimas o al mismo sospechoso, cuya situación procesal comenzó a complicarse, a partir del resultado de este análisis a la ropa hallada en la pieza del acusado, y que según los testigos sería la misma con la que fue visto el primero de este mes, cuando se produjeron los brutales crímenes.

En tanto la Cámara de Apelaciones y Garantías de La Plata resolvería la semana próxima si confirma o no la prisión preventiva de E. O. H. S., el joven de 18 años (cuando fue el hecho tenía 17) acusado por los homicidios a su madre Graciela Holsbak (54); de la nieta de ésta ultima y sobrina del procesado, Alma (5), que fue además mutilada; y su padrastro, Raúl Bravo (54), el primero de este mes en una casa de Melchor Romero.

Fuentes judiciales explicaron que la Sala de Feria -integrada por los camaristas Raúl Dalto, Miriam Ermilli y María Oyhamburu- recibieron el recurso presentado por la defensora oficial del fuero de Responsabilidad Penal Juvenil Raquel Ponzinibio, contra la preventiva dictada contra su asistido por el juez de ese fuero Luis Gabián.

En esta investigación, en el marco de una audiencia oral, la fiscal que interviene en el caso, Carmen Ibarra, alegó que hay evidencias y pruebas como para que el joven siga preso mientras avanza el proceso, detallaron los voceros consultados.

“La fiscal tomó en cuenta como indicios contra el imputado que éste huyó”, señalaron las fuentes.

También dijo en la audiencia que varios testigos lo describieron como un chico violento, que sabía usar cuchillos.

La fiscal valoró el mal vínculo que tenía con su madre y la pareja de ésta, situación mencionada por varios testigos del caso.

Otra evidencia citada por la fiscal contra el imputado es que los amigos explicaron ante la Justicia que lo vieron por el barrio en la hora aproximada del hecho y describieron su vestimenta, luego -como se dijo- secuetsrada en la casa del horror, de calle 523, entre 164 y 165, de Melchor Romero.

Por su parte, la defensa del imputado alegó que no hay elementos como para acreditar la autoría. y mantenerlo privado de su libertad.

El juez, al dictarle preventiva encuadró el caso como “homicidio simple”, con respecto a Bravo; “calificado por el vínculo” en relación a Holsbak.; y por “alevosía” con respecto a la pequeña Alma.

Según el informe preliminar de las autopsias, las víctimas presentaban un promedio de 13 heridas de arma blanca cada una.

El hombre tenía una herida mortal en la zona del corazón; Holsbak una en el abdomen y la niña había sido degollada, su cuerpo descuartizado a la altura de las rodillas y sus restos colocados en una bolsa de consorcio que fue encontrada en la cocina.

En tanto, el adolescente -ahora detenido- desapareció de la casa antes de que fueran hallados los cadáveres y la Policía lo buscó durante cinco días hasta que el lunes de la semana pasada llegó solo, por sus propios medios hasta el Destacamento de Samborombón, en Ruta 2.