La cuarentena, en su "tercera fase": se mantiene, aunque aflojan un poco el lazo

El Gobierno decidió que la cuarentena que le impuso a la sociedad para frenar el contagio del coronavirus entrará el próximo lunes en una “tercera fase”, pero no será levantada. La determinación empezó a ser transmitida por el presidente Alberto Fernández a distintos interlocutores, entre ellos los gobernadores con los que ayer se comunicó desde Olivos.

“Debemos mantener la cuarentena por recomendación de los epidemiólogos. La cuarentena no se va a levantar. Lejos estamos de estar curados con lo que hemos hecho. Cualquier nueva excepción que se haga, no será terminar con la cuarentena”, aclaró Alberto F. en una videoconferencia con los gobernadores, según pudo saber EL DIA de fuentes que escucharon al mandatario.

Una de las mayores preocupaciones es como evitar aglomeraciones en el servicio de trenes

La “tercera fase” que comenzará a las cero horas del lunes podría extenderse al menos otros diez días, de acuerdo a los voceros consultados, bajo la idea de una “cuarentena administrada” que el Gobierno proyecta renovar todo lo que sea necesario para “achatar la curva de contagios” del virus Covid-19. El ministro de Salud, Ginés González García, estima que el pico será en mayo.

El Gobierno acuña un concepto que traslada a los principales actores institucionales: la Argentina pasará de una etapa de aislamiento a otra de “distanciamiento social”. La preocupación del Presidente sigue radicando en el Area Metropolitana de Buenos Aires (AMBA): “Acá está el 70 por ciento de la infección; es un escenario distinto al del resto del país”, afirmo en Olivos.

La reorganización del transporte –sobre todo el de los trenes y colectivos del AMBA- es en este contexto el principal escollo para el regreso a la actividad. Por eso, las conversaciones entre el Gobierno, los empresarios y los sindicatos tienden a fijar “turnos rotativos” en las empresas para que la circulación de trabajadores no produzca el efecto de “hora pico” de aglomeración.

Los trenes que conectan a la ciudad de Buenos Aires con el Conurbano y La Plata están en el centro de las preocupaciones oficiales. Con los micros y colectivos no habría tantos inconvenientes, porque actualmente está funcionando al 50 por ciento y el Ministerio de Transporte busca articular con las empresas que vuelvan a trabajar a tope de capacidad.

Dentro del plan para flexibilizar la cuarentena, el Gobierno también permitirá el regreso de la actividad de construcción, aunque la limitará a la obra pública –repartida entre la Nación y las Provincias-; y el regreso de industrias como la de la maquinaria agrícola, con preferencia de aquellas que estén produciendo máquinas destinadas a levantar la próxima cosecha.

En cuanto a los comercios, el Gobierno escuchó ayer una propuesta para que los locales de proximidad y barriales vuelvan a abrir, pero sólo con un 50 por ciento del personal. Mientras que los shoppings pidieron volver a trabajar con un cliente por cada 16 metros cuadrados. El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, recibió estos pedidos de la Cámara Argentina de Comercio (CAC).

Los restaurantes y locales gastronómicos, en tanto, reclaman que la segunda fase de la cuarentena les permita abrir al 50 por ciento de la capacidad, al tiempo que los cines y teatros permanecerán cerrados, al igual que los estadios de fútbol. Entre las medidas que vienen, el Gobierno suspenderá las fiestas patrias hasta el 17 de agosto, cuando se rinde homenaje al patriota José de San Martín.

También se mantendrá la restricción a la circulación de vehículos. Este fin de Semana Santa, aumentarán los controles en rutas y avenidas de todo el país para impedir que la cuarentena se rompa de hecho. Las fuerzas de seguridad harán “operativos sorpresivos” para “evitar que las personas incumplan el aislamiento social”, anticipó ayer el Ministerio de Seguridad.

La ministra Sabina Fréderic dijo ayer ante diputados nacionales que el Presidente tiene prácticamente definido que el lunes 13 no se abrirán las fronteras áereas y terrestres, mientras que los cines, teatros, estadios de fútbol y recitales continuarán sin actividad como en la primera fase de la cuarentena. Tampoco regresarán las clases en escuelas, universidades y jardines.

Todas estas medidas se van definiendo en las reuniones que Alberto F. mantiene con sus ministros y otros interlocutores en la quinta de Olivos. Ayer fue el turno de los gobernadores, incluido el bonaerense Axel Kicillof. También fue de la partida el alcalde porteño Horacio Rodríguez Larreta. El Presidente volvió a mostrarse flanqueado por ambos mandatarios, del oficialismo y la oposición.

El sector gastronómico pide reapertura con el 50 % de mesas ocupadas

Larreta presentó en Olivos una propuesta para focalizar el aislamiento en la población de adultos mayores, pero los gobernadores advirtieron que era de muy complicada instrumentación en las provincias (ver aparte). El propio Alberto F. admitió que “la Ciudad (Bs. As.) está en condiciones de llevar adelante un protocolo, pero por ahí otros distritos no lo están”. ¿Pensó en el Conurbano?

Los gobernadores volvieron a manifestar su preocupación por el derrumbe de la recaudación de las provincias y el Presidente dijo que la Nación habilitará recursos para enfrentar la emergencia. La asistencia financiera se hará a través de Aportes del Tesoro Nacional (ATN), en una primera etapa –habría dos más- por unos 120.000 millones de pesos a repartir entre las 24 jurisdicciones.

El Gobierno de Córdoba acaba de emitir un bono por 9.000 millones de pesos para el pago a proveedores, aunque voceros de la administración del peronista Juan Schiaretti se esforzaron por aclarar que no se trata de una cuasimoneda. Como ya informó este diario, en la Provincia se viene hablando por lo bajo del regreso de los Patacones, pero Kicillof se opone a esa alternativa.