Indomable: Del Potro no quiere sentar cabeza y dejó otro corazón

Se separó de “Jujuy” Jiménez porque veían “las cosas distinto”, pero la ruptura recuerda mucho a sus anteriores relaciones

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La pandemia no da tregua: no solo amenaza a nuestros seres queridos, sino que también rompe corazones y parejas. Es que la cuarentena, tanto tiempo encerrado con la misma persona, pone a prueba el amor, y algunas parejas de la farándula ya acusaron recibo: tras la separación de Laurita Fernández y Nicolás Cabré, esta semana se confirmaron las versiones que señalaban que Sofía “Jujuy” Jiménez y Juan Martín Del Potro habían cortado el vínculo.

La parejita, que se había empezado a salir en 2019, regresó de Miami, donde Delpo rehabilitaba su rodilla, el 17 de marzo, y apenas pisaron el país se dictó la cuarentena obligatoria. “Veníamos medio raro, faltaba comunicación”, contó la morocha, “y nos agarró la cuarentena”.

Ahora, si analizamos el prontuario del tenista, quizás la cuarentena simplemente hizo florecer lo que parece ser una característica de La Torre de Tandil: a Delpo no le gusta estar atado. El tenista escondió detrás de su perfil bajo muchos romances, pero otros salieron a la luz pública, y la mayoría terminó igual: Delpo, alejándose, y sus parejas deslizando que quizás le faltaba compromiso con el amor. “Hay cosas que vivimos distintas”, tiró Jujuy al confirmar la noticia.

Historia repetida para Juan Martín, que protagonizó su primera relación de largo aliento con Stephanie Demner: la blonda influencer, hoy pareja de un ex compañero de Copa Davis de Delpo, Guido Pella, pasó buena parte de la carrera yendo y viniendo con Juan Martín Del Potro desde 2009. Se enamoraron pero nunca lo confirmaron a la prensa, y ella decía (quizás, se decía a sí misma) que era “porque él es tímido”. La blonda tuvo que esperar años para ser oficializada: cuando Delpo ganó el US Open todos quisieron saber si salía con alguien, pero recién en 2012 la influencer mostró la cara en un partido de tenis en el Masters de Londres. Era lo más cercano a un “blanqueo” que habría.

Y más allá de este “ninguneo”, el tandilense se portó mal: engaño a Demner con una ex “Gran Hermano” y luego se generó un escandalete público cuando se filtraron audios picantes que mantuvo con Johanna Villafañe, una de las mellizas Pombo.

“Me asusté con tanta cosa que ví. Sos enorme”, decía la mediática en el audio, y él contestaba: “Me porté muy bien, pero la próxima no te metas en la ducha porque te violo”.

“Me hizo el mismo verso que le hacen a todas, pero después me enteré que esta de novio legal con otra chica, y la verdad es que sentí una gran decepción al conocer esta noticia. Me siento una boluda total con todo esto que pasó, realmente le creía todas las cosas que me decía y que me prometió. Venía a casa simplemente para abrazarme, y enterarme de que me estuvo engañando todo el tiempo no me gustó para nada”, contó en su momento la ex Pombo, muy enojada con el trato de Juan Martín.

“Me hacía sentir realmente bien, me llamaba no menos de cinco veces por día, me cocinaba, me hizo regalos, chocolates entre ellos, también un osito de peluche. Me abrazaba, me mimaba mucho y teníamos conversaciones muy lindas, en las que me decía que le gustaba en serio, que no quería solamente sexo, sino que quería ir conociéndome y formar una pareja conmigo. Me vendió que quería una relación seria conmigo”, reveló la mediática.

Demner lo perdonó, la relación siguió con idas y vueltas relacionadas con la exigente carrera del tenista y sus constantes viajes, y lo acompañó cuando una grave lesión puso su carrera en jaque por primera vez, en 2015. “Está todo el tiempo cuidándolo. Quiere que vuelva a jugar rápido en primer nivel”, dijeron sus íntimos tras su operación en la muñeca y en el año previo a los Juegos Olímpicos, torneo que marcó el regreso del tenista a la elite. La relación, sin embargo, terminaría quebrándose cuando Demner decidió que era suficiente incertidumbre amorosa.

Años después, la blonda revelaría vivencias de su pasado amoroso que parecían ser anécdotas sobre su tiempo con Delpo y la alta toxicidad de esa relación de juventud. “Una vez me disfrazaron de ir al psicólogo de parejas, fui a la sesión y el chabón resultó ser un estratega: una persona que trabaja de ayudarte con tu ex, por ejemplo, ayudándote a reconquistarlo diciéndote que le mandes tal mensaje, con tal signo, etc. Me había separado en diciembre y desde ese entonces hasta marzo, todos los mensajes que él me mandó eran planeados”, relató.

“Fuimos a la sesión, nos atendió en su casa, todo muy raro. Al otro día quedé con mi ex en que yo no le iba a revisar más sus cosas y que él iba a dejar de cagarme. Esa era la consigna. Él había venido diciendo que cambió, que iba al psicólogo… nos fuimos con esa consigna”, sostuvo.

“Terminó todo mal con él porque él me engañó con otra chica”, recordó Maypi Delgado

 

“Al otro día él se fue de la casa y yo le revisé todo. Siempre tenía como una hoja con todas las contraseñas. Le revisé todo, los mails, el Facebook, Twitter, todo. Le cambié todas las contraseñas porque no quería que entrara para hacerlo él, así que se las cambié todas por ‘hijoderemilputa’. Ya estaba psiquiátrica, hice capturas de las conversaciones y se las guardé en una carpeta que se llamaba ‘Forro hijo de re mil puta’. Ahí fue cuando encontré las charlas con ese ‘psicólogo’, y vi que me forreaban mucho, diciendo que ‘me iban a sacar la pelota’ y que era una ‘minita del orto’”, finalizó, aunque antes lanzó, en aparente referencia a Jujuy: “Cada una tiene que vivir su experiencia. Yo no sé si la gente cambia, quizás cambió, para mí no…”.

Delpo se comportaba de acuerdo a un patrón: una de sus primeras novias secretas, se supo después, había sido Maypi Delgado, ex “Gran Hermano”, pero al tenista le gustaba transitar la noche y todo se acabó.

“Salimos durante cinco meses pero no llegamos a ser novios. Terminó todo mal porque él me engañó con otra chica. Yo creí que era una relación seria pero se ve que para él no porque me enteré que estaba saliendo con otra chica mientras me veía a mí”, contó Maypi.

Delpo no sólo la engañó, sino que también ocultó aquella relación. Y hubo algunas versiones de infidelidad cuando su romance con Jimena Barón se terminó, en febrero de 2018.

Del Potro parecía finalmente haber madurado durante aquella relación, conviviendo con Barón en sus días en Argentina y acompañando la crianza del pequeño Momo, pero el romance se terminó por incompatibilidad de agendas que comenzaban a provocar resquemores: ella, que alguna vez había dejado todo por Daniel Osvaldo, se negaba a repetir aquel error, y quería concentrarse en lo suyo. La actriz y cantante siempre desmintió las versión de terceras en discordia, y solo tuvo palabras de afecto para el tenista, aunque Yanina Latorre llegó a afirmar que el tandilense “nunca dejó de chatear, de vincularse con las cosas que tenía antes de Jimena”.

Tras Barón, vino Jujuy: perfil bajo y mucha belleza para la morocha, una de las primeras morochas de su lista que privilegia las blondas, quien, como Demner, lo acompañó en sus horas más oscuras. Pero, deslizó ella, veían las cosas diferentes. El futuro. Ella dijo varias veces que quería formar familia. Él sigue concentrado en volver a las canchas. En viajar. Y siempre le gustó picotear: tuvo amoríos con la misionera Julia Rohden, de apenas 19 años, y una tal Victoria Malara, y hasta se rumoreó un romance con Susana Giménez, fanática de Delpo. “Me enloquece verte, me encanta”, le dijo la diva en un programa muy picante, con mucho coqueteo, en el que la diva, incluso, mostró todo el poder de su escote.

Al final del día, no solo el tenis sino esa vida de cortejo y amores fugaces parece ser demasiado tentadora para Juan Martín.

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