A río revuelto, ganancia de “pecadores”

Edición Impresa

Por IRENE BIANCHI

irenebeatrizbianchi@hotmail.com / @irenebianchi

- ¡Holis! Seré curiosa. ¿Por qué todas con sombreros y turbantes?

- ¡Las raíces, Susy! ¡Las raíces! Además, queda chic.

- ¿No será que hace tiempo que no se bañan? Menos mal que no se huele por videollamada.

- ¿Querés que le demos bola a Trompita Trump, y tomemos desinfectante, para oler mejor?

- ¿Ese tipo es o se hace?

- Es. Lo demuestra a diario. Como Bolsonaro. Gemelos separados al nacer. Impresentables.

- Hay que tener cuidado con esto de las videollamadas y las videoconferencias. ¿Vieron lo que le pasó al profesor ése?

- ¡Sí! Mientras respondía preguntas de sus alumnos, la jermu pasó en bolas por atrás.

- Peor el funcionario americano que tuvo que renunciar tras revolear a su gato por los aires, con mucho donaire, durante una videoconferencia. Un tal Platzer.

- Hubo otro. Un periodista español, Alfonso Merlo, conversaba con otro colega por un canal de Youtube, y su joven amante pasó en tarlipes por atrás. Imagínense la reacción de su novia, la oficial …

- Detrás mío, a lo sumo podrán ver a mis gatos o mis perros. Estoy solanolima.

- Más solo que Tinelli en el Bailando. Si se hace, cosa que dudo, van a estar todos separados por acrílicos. Nada de intercambio de fluidos ni secreciones; nada de roces, de frotes, de fricciones. Y se oirán reidores grabados, porque nada de tribuna ni familiares. Y el cabezón no se resigna a renunciar al bodrio.

- Tiene resto. No creo que eso afecte su bolsillo. Que nos dé un respiro. Alguna ventaja tiene que traer este maldito virus.

- Por suerte en la tele se empiezan a hablar de otras cosas. Separaciones a granel.

- ¿En serio? ¿Por la convivencia forzosa?

- No necesariamente. Cabrón Cabré, el depredador serial, se cobró otra víctima. Laurita.

- Y las minas no escarmientan. Hay que huirle como a la peste.

- Sí, pero a la Tauro se le fue la mano. Dijo que se lo podría castrar, como a los pichichos.

- ¡Epa! No es para tanto. Con evitarlo, suficiente.

- Otro divorcio. Jujuy y el potro manco.

- Ojo que también habrá múltiples embarazos. Un “baby boom”, como el que hubo después de la Segunda Guerra Mundial. Se los llamó “baby boomers” a los nacidos en esa época. Nosotras caemos en la volteada, sin ir más lejos.

- ¿”Baby boom”? Yo tengo otra palabrita nueva: “zoomple”.

- ¿Y eso qué es?

- Un cumpleaños celebrado vía zoom.

- Mirá que dicen que los cumpleaños que cayeron en marzo, abril y mientras dure la cuarentena, no cuentan. Se conserva la misma edad.

- No nos quejemos, chicas. Más vale seguir encerraditas, ahora que a algunos trasnochados se les dio por mandar a unos cuantos delincuentes a sus casitas. Ojalá los liberados reincidan en los domicilios de sus benefactores, así viven en carne propia lo que sienten las víctimas, nunca tenidas en cuenta.

- Hasta la doctora trucha Rímolo pidió prisión domiciliaria. Y Grassi, el pedófilo.

- A río revuelto, ganancia de “pecadores”.

- Bueno, chicas, me retiro. Hoy me toca limpiar el horno, trabajo insalubre. Le vengo esquivando el bulto hace semanas.

- No hables de bultos, Elvi, que estamos en cuarentena. Las quiero, chicas. ¡Chin, chin!

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE