El Estado y una desaparición que debe esclarecer

A más de dos meses de la desaparición de Facundo Astudillo Castro (22), que fue visto por última vez el 30 de abril pasado luego de salir de su casa ubicada en la localidad bonaerense de Pedro Luro, las investigaciones policiales y judiciales realizadas avanzaron muy poco y nada concreto se sabe sobre el paradero de este joven cuyo último rastro es un acta de infracción a la cuarentena que habrían labrado policías de la provincia de Buenos Aires.

Tal como se informó, trascendió una foto tomada a Facundo cuando fue visto por última vez. En ella se lo ve parado y de espaldas, junto a un policía bonaerense, en momentos en que le realizaban un acta de infracción al artículo 205 del Código Penal que reprime al que viole medidas adoptadas por las autoridades para impedir la introducción o propagación de una epidemia. En la fotografía además se encuentra una camioneta policial Toyota Hilux que fue secuestrada en el allanamiento del miércoles pasado para ser peritada.

La causa judicial se encuentra ahora a cargo de la Justicia Federal, luego de que la jueza de Garantías de Bahia Blanca actuante al inicio declinara la competencia. Ante un pedido del fiscal, la magistrada resolvió pasar el expediente a la Justicia Federal y ordenó remitir lo actuado y los distintos elementos que fueron secuestrados al Juzgado Federal de Bahía Blanca, tal como lo había solicitado la madre del joven. El organismo ahora a cargo ya concretó un allanamiento en la subcomisaría de la localidad Mayor Buratovich.

Como suele ocurrir en estos lamentables episodios, la familia del joven desaparecido, especialmente su madre, pidieron la detención de los responsables y que estos indiquen dónde se encuentra el joven. “Estamos pidiendo que se esclarezcan los falsos testimonios” dijeron, para reseñar que “lo subieron arriba de un patrullero y no apareció más”, lamentó. Aseguró tener la certeza de que “en Mayor Buratovich algo le pasó”.

Tras más de dos meses de absoluto silencio, sin que nadie se ocupara de esta desaparición, se conoció ayer una declaración de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en la que exigió al Estado argentino “inmediatez y exhaustividad de la investigación” por la desaparición de Astudillo Castro. El organismo internacional reclamó la mayor independencia de los profesionales intervinientes y que se tengan “en cuenta todas las hipótesis posibles”, según informó la Comisión Provincial por la Memoria (CPM). Fue esta entidad la que pidió la intervención del Comité contra la Desaparición Forzada de la ONU, luego de constituirse como querellante en la causa por la desaparición forzada de Astudillo.

Fueron la participación de la ONU y una declaración del Gobernador bonaerense –”no vamos a encubrir a nadie ni a prejuzgar a nadie, estamos colaborando en todo con la investigación”- las únicas expresiones formuladas desde ámbitos oficiales o privados sobre un caso que debiera suscitar un reclamo generalizado, tanto por parte de las autoridades con incumbencia en estos temas como por las múltiples organizaciones privadas, entre ellas las de entidades defensoras de los derechos humanos, que se han mantenido, sin embargo, en silencio frente a la desaparición de Astudillo.

Es en definitiva la sociedad toda, son los distintos partidos políticos y otras instituciones relacionadas al derecho y a la vida de las instituciones de la República las que también debieran expedirse, reclamando por este caso. No obstante, como primer responsable, le corresponde al Estado procurar la reaparición de Astudillo y el esclarecimiento completo del episodio, con la mayor celeridad posible.