Con el príncipe en la pizarra

Leandro Desábato va pensando en su equipo para cuando vuelva la competencia, y obviamente que espera y desea el regreso de José Sosa cuando termine su participación en Turquía.

El parate lo encuentra al entrenador albirrojo repasando videos y diagramando distintas variantes tácticas para poder imprimirle a sus dirigidos en el futuro. Distintos esquemas con alternativas de apellidos pero con una matriz basada en la experiencia de los referentes.

Mariano Andújar, Javier Mascherano y la cercana vuelta de Sosa serían la base para poder potenciar a los más chicos y a los no tanto. Marcos Rojo también entra en la cabeza del DT, pero su continuidad hoy es muy difícil.

Hace bastante que Sosa, como se dice habitualmente, juega “por adentro” y ahí lo va imaginando el Chavo; ya sea en un 4-4-2 junto a Mascherano, o bien en un hipotético 4-3-3 como volante interior o mixto.

Claro está que el regreso del nacido en Carcarañá (se puede definir a principios de agosto) no sería el único movimiento del mercado. La dirigencia busca un defensor central, un lateral por izquierda y un delantero de área. Esos puestos son los prioritarios, siempre y cuando no se produzca la salida de algún valor importante.

El mercado asoma demasiado tranquilo en este fútbol argentino lleno de incertidumbre, y Estudiantes se está moviendo con posibles llegadas y también algunas salidas, pero sin dudas la principal expectativa del hincha gira en torno a José Sosa. Y quizás en pocos días ese anhelo se transforme en realidad.

 

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