Entró a robar en una casa: es de un policía y lo recibió un pitbull

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Con algunas heridas causadas por mordiscones pero sin llegar a ser graves, un joven de 19 años fue detenido durante la madrugada de ayer, luego de que intentara robar en una casa de Tolosa.

Según le informó a este diario una fuente del caso, las cosas no se le podrían haber presentado peor para el sospechoso: le puso el ojo al domicilio de un policía y tras el paredón que saltó lo esperaba un perro de la raza pitbull, que tiene como principales características la ferocidad y el alto poder de daño de sus mandíbulas.

El hecho ocurrió en una vivienda de 528 entre 30 y 31 cuando un oficial de la Policía que presta servicio en Ensenada se despertó al escuchar los ladridos de su mascota.

Cuando corrió la cortina de la ventana de su habitación que da a un patio vio que el animal tenía acorralado a un individuo que pedía ayuda tras haber recibido algunos tarascones.

El dueño del perro, un policía de 23 años, logró controlar al animal, oportunidad que el ladrón aprovechó para escapar pero ya a esa altura y tras un llamado al 911 efectivos del Comando de Patrullas y del Gabinete Técnico Operativo de la comisaría de Ringuelet lo tenían rodeado.

Con intervención de la UFI N° 11 del fiscal Álvaro Garganta el joven quedó imputado por tentativa de robo calificado por escalamiento.

El caso de Tolosa tiene un antecedente reciente en la Ciudad, con un final trágico.

El 21 de junio, en una vivienda situada en 85 y 27, un joven al que las fuentes identificaron como Dylan Escudero, de 19 años, trepó por el paredón premoldeado y al descolgarse hacia el interior del patio se encontró con dos perros, uno de la raza pitbull y un mestizo. Apenas lo vieron, se abalanzaron sobre el joven que, presumieron entonces en la Policía, habría intentado un escruche.

El primero en acudir en auxilio de Escudero fue un vecino que escuchó sus gritos, vio lo que pasaba y trató de dispersar a los perros tirándoles agua, táctica que no surtió el efecto deseado.

Otros frentistas de la cuadra se fueron sumando a la escena, pero la aparición de un móvil del Comando que patrullaba la zona apuró el operativo de rescate. El joven murió antes de llegar al Hospital por las múltiples mordeduras en las piernas, los brazos y el cuello.

 

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