El mandatario republicano apunta buena parte de su artillería contra Kamala Harris

Edición Impresa

En la elección de 2016, el candidato Donald Trump apenas aludió al candidato vicepresidencial demócrata Tim Kaine, pero ahora, el presidente apunta buena parte de su artillería contra Kamala Harris.

Trump afirmó hace poco que “nadie la quiere”, usando un patrón de simpatía más aplicable a las mujeres en posiciones de liderazgo que a los hombres. Asimismo, Trump y sus aliados pronuncian mal el nombre de Harris, según sus partidarios adrede para retratar a la hija de inmigrantes, negra y de ascendencia asiática, como indigna de estar en la primera fila de la política.

Trump va contra Harris porque se le dificulta montar un ataque coherente contra el candidato presidencial Joe Biden, con más fama de acuerdista que de progresista. El racismo y sexismo que sustentan la crítica de Trump son parte de una estrategia agresiva para ganar votos en la clase media blanca. (AP)

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE