Las restituciones platenses

Edición Impresa

El documento dado a conocer por la ONU y que favorece el reclamo de la comunidad tehuelche para que el Museo de Francia restituya los restos de Sakamata Liempichún (ver nota central), entra en perfecta sintonía con la política adoptada por el Museo de Ciencias Naturales de La Plata desde 1994, cuando se realizó la histórica restitución de los restos del cacique Inacayal (la primera restitución de restos humanos conservados en una institución académica con fines científicos).

Hace apenas unos días, de hecho, este diario informó que los restos óseos de Maish Kensis y otros cuatro yaganes que integran las colecciones del Museo local

están próximos a ser restituidos a su comunidad en la República de Chile.

“Estamos a vísperas de que el Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la Universidad Nacional de La Plata lo apruebe. Sería la primera vez que se haga de forma virtual pero ya el Consejo Superior de nuestra Universidad Nacional de La Plata sesionó de esa manera días atrás aprobando la restitución de tres hombres Wichí a su comunidad”, confirmó el antropólogo Fernando Miguel Pepe.

El especialista en restituciones remarcó que “estamos decididos a tener todo listo para que cuando se abra nuevamente el Museo se entregue a Maish Kensis a su descendientes”. En este caso, la restitución será la de Maish Kenzis, quien llegó prisionero al Museo de La Plata en 1886 junto a otros integrantes de su comunidad, con los que había compartido cautiverio durante dos años en una misión en Ushuaia.

Vale precisar que esta será la segunda restitución de carácter internacional que, por su intermedio, concretará el Museo de La Plata, ya que la primera fue, en 2010, la devolución a Paraguay de los restos de una niña de la etnia Aché capturada en 1896 tras la matanza de su familia.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE