Otra entradera brutal y fuerte reclamo vecinal en Villa Elisa

Al menos dos motochorros protagonizaron una violenta entradera en una vivienda de 23 y 420, en Villa Elisa, donde controlaron y golpearon a una pareja de jubilados para robarles, denunciaron vecinos de la zona. Poco después, varios de ellos se concentraron frente a la comisaría Duodécima para pedir seguridad.

El hecho ocurrió alrededor de las 20.30 del miércoles pasado, cuando las víctimas se disponían a entrar en su casa y fueron abordados por los delincuentes, quienes arremetieron a los golpes para lograr su cometido. Según afirmaron vecinos, el hombre “recibió tantos golpes que tuvo que ser asistido en el Hospital San Roque de Gonnet”.

“Vino el SAME, luego la policía. Nosotros iremos al hospital a ver cómo está el hombre, porque estamos preocupados por su salud”, afirmaron frentistas conocidos de las víctimas. “Esto es un desastre, es una locura lo que está pasando. Al hombre le dieron un golpe fortísimo en la cabeza y lo mandaron al hospital, donde le practicaron una tomografía para determinar el grado de la lesión”, sumaron los vecinos. La mujer, en tanto, sufrió un pico de presión a causa del terrorífico momento que le hicieron vivir los ladrones.

Según se informó, los asaltantes buscaban dinero y elementos de valor y es probable que “algo de eso se hayan llevado” apuntaron los frentistas, convencidos de que el episodio “tiene relación con la falta de luminarias y de la oscuridad que hay en esta calle. El barrio es una boca de lobo y esto es tierra de nadie”, aseguraron.

“No podemos salir, hay un desastre social bárbaro, necesitamos más control policial y luces en la calle”, insistieron. Y el jueves llevaron su reclamo a la comisaría de Villa Elisa.

En una carta abierta, los frentistas de 422 y 23 expresaron su indignación con la situación de inseguridad, al tiempo que pidieron a las autoridades que aborden la problemática y se busquen soluciones para ponerle freno a los delitos.

“El reclamo fue por seguridad en la zona de la calle 23 y las perpendiculares 419, 420, 421, 422 y 423”, indicaron. “No soportamos más los niveles de inseguridad que estamos viviendo. No queremos resignar el horizonte de un barrio seguro, con políticas activas que nos garanticen transitar por los patios de nuestras casas, por las calles donde nacimos, con total y entera tranquilidad”, enfatizaron.