“Fragmentos de una mujer”: un viaje desgarrador al infierno de una pareja

Sin cines abiertos, las plataformas on demand se han convertido en la ventana de las películas que quieren llegar a los Oscar: una de ellas, “Fragmentos de una mujer”, llegó ayer a Netflix, tras pasar por el Festival de Venecia.

La cinta del húngaro Kornél Mundruczó (“White Dog”) y protagonizada por Vanessa Kirby y Shia LaBeouf relata la bajada a los infiernos de una pareja destrozada por un aborto: Martha (Kirby, la actriz inglesa que interpretó a la princesa Margarita en las primeras temporadas de “The Crown”) y Sean (LaBeouf), una pareja feliz a punto de ser padres, asisten al derrumbe de sus vidas cuando ella aborta tras un desastroso parto en casa asistido por una obstetra insegura que después será acusada de negligencia.

Este es el comienzo de una auténtica bajada a los infiernos para la pareja, que se despedazará a la hora de afrontar este aborto y en todas las decisiones que deberán tomar, como donar el cuerpo de la pequeña a la ciencia o proseguir el juicio contra la partera. La película arranca con una única secuencia de media hora de infarto, con el parto de la madre: la audiencia ve en primera fila la representación más realista y gráfica de un parto casero que se haya hecho en el cine. Es un parto difícil y la situación se torna más estresante cuando la matrona no está disponible y envía a un reemplazo.

escenas incómodas

Es un comienzo brutal y sobrecogedor para una película que está comprometida al contar la horrible verdad sobre una pérdida tan devastadora que es casi tabú. Pero es sólo una de muchas escenas profundamente incómodas.

Al igual que Martha y Sean, uno se siente paralizado y agotado tras los eventos del comienzo y sin más opción que continuar este viaje emocionalmente desgarrador y conmovedoramente visceral con ellos: si la incomodidad visceral se siente más auténtica de lo usual, es porque la historia es personal para el director y su pareja, ya que Kata Wéber escribió el guion basado en su propia experiencia al perder un hijo con el director Kornél Mundruczó durante el embarazo.

Martha intenta seguir adelante con su vida, pero constantemente recuerda lo que pasó, en hechos o atravesando todos los cambios físicos postparto. También navega por el dolor de su propia familia, peleas por entierros y epitafios, así como una batalla legal contra la matrona sustituta (Molly Parker).

“Quería comprender el nivel de dolor y efectivamente representar ese dolor de las mujeres con las que he hablado. Y para mi ha sido un deber buscar el sentido de la pérdida de estos niños perdidos que quedan presentes”, explicó Kirby, que aclaró que no es madre, pero que con su rol en la película tiene casi asegurada una nominación a los Premios de la Academia, su primera.

Pero “Fragmentos de una mujer” esconde mucho más, como las convulsas vidas de la pareja antes de conocerse, que emergerán con el dolor, y el pasado de la familia de ella, marcado por el Holocausto. Por eso la capacidad de sobrevivir y el desinterés por la venganza serán parte de la genética de la madre tras el dolor de la pérdida de su bebé.