Murió calcinado en su casa, ante la desesperación de sus vecinos que no lograron rescatarlo

Momentos de desesperación se vivieron ayer en un sector de Melchor Romero por la muerte de un vecino que no pudo escapar del incendio que destruyó su vivienda. Según explicaron fuentes oficiales a este diario, promediaban las 10 de la mañana cuando las llamas se apoderaron de una casa ubicada en calle 523 entre 155 y 156, en donde residía hasta ayer la víctima fatal del siniestro, un hombre de 69 años que en el barrio era conocido como “El Pura”. El fuego y el humo no tardaron en hacerse visibles en el vecindario, encendiendo alarmas entre los residentes que de forma inmediata dieron aviso a los bomberos. También hubo quienes acudieron de forma desesperada con baldes y mangueras a la casilla envuelta en llamas para intentar sofocar o al menos reducir el poder destructivo del foco ígneo, mientras aguardaban el arribo de los rescatistas y sus autobombas.

La preocupación cundió aún más cuando el fuego amenazó con alcanzar una vivienda lindera, lo que podría haber desatado una tragedia aún mayor. En cuestión de minutos la lucha por poner a resguardo a “El Pura” y a las casas de la zona se volvió insostenible. La voluntad de los vecinos no pudo hacerle frente a las llamas que avanzaron con gran rapidez debido a que en la propiedad había una gran cantidad de materiales inflamables.

“Siempre prendía fuego para cocinar y es probable que haya prendido la casilla”, aseguraron los vecinos a EL DIA. “Lo escuchábamos gritar, pero lamentablemente no pudimos hacer nada”, sostuvo un vecino, Raúl, aún conmocionado.

Cuando llegaron los bomberos la precaria casilla ya había sufrido el desprendimiento de varios tirantes que se estima que se debilitaron por la acción destructiva del fuego. Si bien el caso es materia de investigación, se proyecta que algunas de las vigas de madera pudieron haber caído sobre la humanidad del propietario generando que quedara sin chances de huir.

Lo concreto es que los bomberos trabajaron varios minutos hasta que lograron sofocar las llamas y poner a resguardo a las demás casas. Al ingresar a la finca, los bomberos encontraron el cuerpo entre los escombros aún humeantes.

Otra vecina contó que le dijo “en varias oportunidades que vaya a pedir una casilla cuando los políticos las daban, pero él decía que le daba vergüenza”.

La casita de “El Pura” estaba al lado de la de su madre. “Salía a pedir cosas y la gente le daba. Vivía solo con sus animales”, relataron en el barrio. Tras el hallazgo, la policía científica se hizo presente en el lugar para tomar muestras que permitan esclarecer cómo se inició el fuego.

En la zona había un clima de zozobra ya que la víctima vivía desde su adolescencia en el lugar. Los vecinos contaron que en su juventud “fue mochilero” y era común verlo encender fuego en su casa. “En varias oportunidades lo vimos prendiendo fuego para poder cocinar. En invierno lo hacía más seguido ya que era su método para calefaccionar su casilla”, indicaron frentistas. Según se informó oficialmente, “en el lugar se halló una gran cantidad de objetos como ropa, papeles, cartones y maderas, todos de carácter altamente inflamable”.