Tras el escándalo sigue Alemán, al igual que el debate entre los hinchas

Sobre el cierre de la semana pasada, el nombre de Brahian Alemán estuvo en el foco de todas las miradas por un episodio que incluyó a tres Juveniles del Lobo y el característico “bautismo” que suele ser moneda corriente en Gimnasia desde hace varios años, pero que se ha profundizado en las últimas pretemporadas.

Sin embargo, y tal como afirmó este matutino en las ediciones previas, el uruguayo pidió las disculpas correspondientes del caso y, por lo menos por ahora, seguirá vistiendo la camiseta azul y blanca, con la que fue, junto a Johan Carbonero y Germán Guiffrey, uno de los mejores en los dirigidos por Leandro Martini y Mariano Messera en el certamen anterior.

Sin embargo, y pese a que el sacudón entre el zurdo y la dirigencia albiazul quedó en la historia, no pasó lo mismo en cuanto a los hinchas, quienes se han debatido en las redes sociales la continuidad o no en el conjunto Tripero del nacido en Montevideo hace 31 años.

Más de uno puso sobre la mesa las constantes acciones fuera de la cancha de Alemán, por quien se hizo un esfuerzo grande para repatriarlo del fútbol de Arabia, e incluso se lo “presentó” antes de tiempo, en aquel cumpleaños del Club.

Otros, por tanto, apelaron a su técnica individual, que sale a la luz cuando se encuentra bien desde lo físico, otro de los puntos a tener en cuenta en los pros y contras de tenerlo en el plantel.

Lo cierto es que el uruguayo, a quien le queda un año más de contrato con el Lobo, parece haber entendido el mensaje y seguirá siendo parte de un equipo que lo necesita y en el que ahora intentará generar una sociedad futbolística con Luis Miguel Rodríguez, quien usará la “10” que tiempo atrás tenía a Alemán como dueño.