Con gran sigilo se metieron en una veterinaria y robaron un ecógrafo en pocos minutos

A media tarde, con el negocio funcionando a pleno ¿quién se atrevería a hurgar a metros del salón donde se atiende a las mascotas y los pedidos de sus dueños. La audacia superó los cálculos en la veterinaria situada en 44 y 152: en cuestión de minutos, acaso, segundos, se llevaron un costoso ecógrafo que es clave para la atención de animales pequeños, la especialidad del local.

El episodio se registró el jueves, según denunció Sol (34) una de las dueñas de “CIVET”, entre las cuatro y las cinco de la tarde. La profesional detalló que “sentimos ruido, pero yo pensé que estaba sugestionada por un asalto que tuvimos hace poco. Igual, llamamos a la Policía”, indicó.

La sospecha, enturbiada por la experiencia en el escenario de inseguridad, se confirmó de la peor manera. Según los indicios que se recogieron luego, el o los intrusos forzaron una puerta que da hacia la parte posterior del local, donde hay un depósito. Adentro de un armario estaba guardado el ecógrafo, algunas pertenencias de la veterinaria que habló con este diario y herramientas de mano. El despojo fue completo e incluyó hasta una pava eléctrica.

El equipo electrónico “Mindray DP 30 VET” es clave para el servicio. Tiene un valor que puede oscilar entre los 300 y los 500 mil pesos. Con la intención de cortar el circuito negro y recuperarlo, las propietarias de CIVET hicieron circular una imagen por las redes sociales en las que se exhiben fotos y se ofrece una recompensa.

“Puse los datos del equipo y la foto porque es algo muy específico que no sé a quien se lo van a vender. Quizás se lo ofrecen a otro profesional o me ayuden a encontrarlo”, analizó Sol.

En el comercio situado en San Carlos, con una fuerte clientela de propietarios de mascotas, se lo considera una herramienta clave para estudios de abdomen de pequeños animales.

“Siento tristeza. Estoy mal porque es nuestra herramienta de trabajo. Da la sensación de que no se puede avanzar. Una invierte y te lo sacan”, analizó la profesional.

El cuadro se agrava con una experiencia previa: “Hace 20 días, cuando estaba cerrando, entraron dos ladrones con armas. Me apuntaban todo el tiempo y se llevaron plata mis pertenencias”.

Fueron dos atracos en los cinco meses de actividad que lleva el negocio, desde que fue creado en febrero. Allí se desempeñan tres profesionales y ya hay movimiento fluido.

Los robos también son una situación conocida en los comercios vecinos. “La situación es decepcionante. Además, se vive con miedo por lo que pueda pasar en medio de un asalto”.

Mientras se esperaba en CIVET por los peritos de la Policía, en la cuadra se reclamaba más patrullaje preventivo.