La dupla Díaz-Boselli alimenta la chance del tridente ofensivo
Edición Impresa | 30 de Enero de 2022 | 03:36

Estudiantes se ha movido bien y rápido dentro del actual mercado de pases, en el que más allá de las caras nuevas ha logrado cumplir con uno de los principales deseos de Ricardo Zielinski: las continuidades claves de Leonardo Godoy y Leandro Díaz.
Ante esto el Loco, que ayer volvió a sumar minutos tras la molestia que lo dejó afuera del encuentro ante Vélez, demostró que sigue en modo final del 2021, y fue una verdadera pesadilla para la última línea de Defensor Sporting.
Luchando cada pelota y definiendo las que tuvo, el exAtlético Tucumán además se combinó muy bien con Mauro Boselli, mucho menos combativo pero mucho más técnico y resolutivo que el surgido en Lanús.
De esta manera, el primero de ellos convirtió dos goles, uno servido por Godoy y el otro por el campeón de la Copa Libertadores 2009, en tanto que quien regresó proveniente de Cerro Porteño aportó el restante, con una gran jugada colectiva junto a Emmanuel Mas.
Frente a esto, Díaz y Boselli comienzan a dejar en claro que se entienden y comprenden los movimientos que debe llevar a cabo uno para alimentar al otro, y viceversa, por lo que es difícil pensar en que Zielinski pueda dejar a uno de ellos afuera del estreno por los puntos ante Independiente en el Jorge Luis Hirschi.
Sin embargo, la gran duda que aparece en cuanto a esto es si el DT analiza la chance de cambiar el esquema y jugar con tres delanteros, una vez que Gustavo Del Prete pueda sumarse a los trabajos con normalidad, ya con el alta médica en su poder.
Por lo pronto, tanto Tuti como el Loco han sido de lo mejor del Pincha en el certamen pasado, donde se han combinado para 19 de los 43 goles que gritaron los dirigidos por Ricardo Zielinski.
Pese a esto, para que el cambio en el dibujo táctico se haga realidad, el Ruso debería meter mano en el mediocampo y dejar en el banco de los relevos a uno de los cuatro nombres que componen esa línea media.
Con Fernando Zuqui como una fija en el once, y a la espera de la recuperación también de Jorge Rodríguez, todo parece indicar que la lucha mano a mano estará, a priori, entre Matías Pellegrini y Manuel Castro, otro de los máximos artilleros del León.
Lo cierto es que el poder ofensivo de Estudiantes sigue más que vigente, y probablemente pase a ser el principal arma de un equipo que no logra mostrar solidez, pero que lastima y mucho adelante.
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