Cine catástrofe, animación y romance en la campiña francesa, los otros estrenos

Además de la última película de Pedro Almodóvar, las salas platenses recibirán hoy tres estrenos.

Uno de ellos es un “tanque” que marca el regreso del “cine catástrofe” a la pantalla grande: Roland Emmerich, especialista en el género conocido por obras como “El Día de la Independencia” y “2012”, dirige “Moonfall”, en la que la Luna sale de su órbita y se dirige hacia la Tierra, suceso que provocará una catástrofe colosal. La única oportunidad de la humanidad será contar con un improbable grupo de inadaptados que deberán trabajar juntos para salvar al planeta.

El segundo de los estrenos de esta semana está orientado al público infantil: la película animada ucraniana “El regreso de Gulliver” relata la historia del viajero y aventurero Gulliver, invitado a regresar a Lilliput, la ciudad que previamente salvó de la flota enemiga del vecino Blefuscu. Cuando llega, solo encuentra indignación, pánico y una multitud desesperada, ya que el Rey de Liliput hizo creer a su gente que el legendario Gulliver Gigante estaba regresando. En cambio, descubren a un hombre común, cuando todo el pueblo se estaba preparando y construyendo alojamiento para recibir a un gigante. Decepcionado, el Rey ordena la ejecución de Gulliver. Mientras tanto, la invencible armada Blefuscu está a las puertas de la ciudad y vuelve a amenazar con atacar.

El tercer estreno es otra película europea: “Las cosas que decimos, las cosas que hacemos”, de Emmanuel Mouret, que tiene lugar durante unas vacaciones en la campiña francesa. Daphné, embarazada de tres meses, se encuentra sola para recibir a Maxime, el primo de su novio François, quien ha tenido que irse a París para cubrir a un compañero enfermo.

Durante cuatro días, mientras esperan el regreso de François, Daphne y Maxime se conocen y comparten historias muy íntimas que los acercarán. Compuesto de aventuras amorosas que se superponen y complementan, estos relatos, engarzados con minuciosidad de orfebre, carentes de toda afectación y siempre estimulantes, responden a un hábil mecanismo que define a varios personajes errantes encarnados por intérpretes en estado de gracia.