Kicillof también tendrá que negociar otro cargo clave con la oposición

En agosto terminan los cuatro años de gestión de Carlos Baleztena, que había sido nombrado por Vidal. Las miradas, en el Senado

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José Picón

jpicon@eldia.com

Ocurrió con la designación del nuevo presidente del Tribunal de Cuentas y en breve, se dice, con la cobertura de al menos dos vacantes en la Suprema Corte. Axel Kicillof tendrá que negociar en breve con la oposición otro cargo de enorme relevancia para la administración bonaerense. En los primeros días de agosto vence el mandato del Contador General y el Gobernador tendrá que volver a pasar por el filtro del Senado para darle continuidad al actual funcionario o impulsar un reemplazante.

Hablar con Juntos por el Cambio volverá a ser imprescindible para el oficialismo. Se necesitan dos tercios de los votos en la Cámara alta para impulsar este nombramiento. Sin el acuerdo opositor, la cerradura de esa puerta no se abrirá porque tanto el oficialismo como la oposición están empatados en 23 bancas.

La Contaduría General es, junto a la Fiscalía de Estado, la Tesorería y el Tribunal de Cuentas, uno de los denominados organismos de control del Estado bonaerense. Su función es verificar, supervisar y vigilar los procesos administrativos derivados de todas aquellas operaciones de las que surjan modificaciones en la hacienda pública.

El primer dato interesante para apuntar es que el Contador se elige de manera inversa a otros cargos. Es el Senado el que aprueba una terna de la que luego el Gobernador toma uno. Este es el trámite formal. Pero en la práctica el nombre señalado surge de un acuerdo político previo.

El actual Contador General es Carlos Baleztena. Fue designado durante el gobierno de María Eugenia Vidal y esa sola circunstancia podría sugerir que Kicillof acaso quisiera nombrar a un profesional de su confianza. Sin embargo, Baleztena es un funcionario de carrera del ministerio de Economía, que cumplió funciones de relevancia durante los ocho años de la administración de Daniel Scioli. Oriundo de General Lamadrid, su labor es reconocida en el propio oficialismo.

Contador público recibido en la Universidad Nacional de La Plata, tiene 51 años. Cumplió funciones en la Agencia de Recaudación de la Provincia (ARBA) y en la Dirección General de Escuelas durante el sciolismo. Cuando el ahora ministro de Desarrollo Productivo de la Nación concluyó su mandato en la Provincia, fue a desempeñar el cargo de secretario de Economía con el intendente del PRO de Tres de Febrero, Diego Valenzuela.

Desde el 10 de agosto de 2018 es el Contador General de la Provincia por decisión de María Eugenia Vidal. Y como su mandato es de cuatro años, está a punto de vencer.

No hay nombres, al menos en la categoría de trascendidos, que estén dando vueltas en el horizonte como para reemplazar a Baleztena. Hay quienes apuestan a que podría seguir. Otros asignan alguna chance al Subcontador General Nicolás Diner.

Diner parece contar con un valor agregado: es un hombre de confianza del Federico Thea, el flamante presidente del Tribunal de Cuentas. Muy cercano, también, al ministro de Economía, Pablo López.

Sin embargo, el mandato de Diner no expira ahora: le quedan tres años más en el cargo.

Lejos quedaron los tiempos en los que los organismos de control estaban plenamente en manos de la oposición. Esa costumbre se fue perdiendo con el tiempo. De hecho Kicillof puso a Thea en el Tribunal de Cuentas. ¿Qué pasará ahora en la Contaduría?

 

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