Otra madrugada sin micros en La Plata y el martes arrancó con menos frecuencias: reunión clave

Cumplida la cuarta medida de fuerza consecutiva de los empresarios del autotransporte, se esperan para hoy los resultados de una reunión que mantendrán las cámaras que nuclean a las líneas de colectivos con las autoridades nacionales, encuentro del que depende la posibilidad de insistir con el “lock out” patronal, ya sea con la suspensión total de los servicios o con el recorte de frecuencias, o dejar atrás cualquier acción de protesta.

Entre la noche de ayer y la madrugada de hoy (puntualmente entre las 22 y las 5) dejaron de circular otra vez en la Región los micros de la órbita municipal y provincial con recorridos en la Región (La Plata, Berisso y Ensenada). Mientras que el martes arrancó con una notable baja de frecuencias de las unidades. La medida es una reacción de las compañías de colectivos que integran las cámaras Empresaria de Autotransporte de Pasajeros (CEAP), Empresaria del Transporte Urbano de Buenos Aires (CETUBA) y de Transporte de la Provincia de Buenos Aires (CTPBA) debido a que no están cobrando subsidios que se les adeuda desde hace un tiempo. Las firmas exigen que se regularicen las transferencias por las subvenciones a los pasajes y aseguran que, en ese sentido, el gobierno nacional acumula con ellas una deuda que asciende a los 17 millones de pesos.

“La suspensión se realizará en horario nocturno, entre las 22 y las 5”, dijo al cierre de esta edición una fuente de las cámaras que llevan adelante el reclamo y agregó: “a partir de esa hora se normalizarán los servicios con las frecuencias habituales”.

La misma fuente confirmó que hoy se producirá una nueva reunión con funcionarios nacionales. “Tenemos agendada una audiencia, ya que nos convocaron a las cámaras del transporte, y ahí veremos qué respuesta tenemos a nuestro pedido, que más que nada necesitamos la certeza de cronología de pagos y de cuantía en los pagos para saber con qué recursos contamos y así poder brindar la cantidad de servicios necesaria”. El encuentro será con el secretario de Articulación Interjurisdiccional del ministerio de Transporte de la Nación, Marcos Farina.

Aunque para los horarios diurnos de la víspera no se habían anunciado restricciones en los servicios, en las paradas de micros de la Ciudad se escucharon algunas quejas por las largas esperas que sufrieron usuarios antes de abordar el ramal que los llevaba a destino. Esos escenarios, en más de un caso, se vieron colmados de pasajeros que se acumularon frente a la demora del micro.

Así vivió su espera del micro Marcela. La usuaria afirmó que “se nota que hay menos frecuencias; y más lo notamos los que necesitamos ir a trabajar, que no llegamos a tiempo”. Según la mujer, los servicios “no son tan regulares como tienen que ser a diario y eso se siente”. A su vez, en esa línea, Cecilia, otra vecina que se encontraba en una de las paradas, comentó que “hace 15 minutos que estoy esperando el micro”.

Por otra parte, el último cese de actividades resuelto por los empresarios se desarrolló no sin complicaciones para los usuarios. Un gran número de vecinos de la Región que trabajan en horarios nocturnos tuvo dificultades para asistir a sus obligaciones laborales, y muchos de ellos se vieron obligados a tomar servicios de taxis o remises, cuyas tarifas están muy por encima de los valores que se pagan por viajar en micro.

Lo mismo pasó con las medidas adoptadas para la noche y madrugada del viernes, sábado y domingo. También en esas oportunidades los usuarios de los servicios nocturnos tuvieron que utilizar transportes alternativos para llegar a sus lugares de trabajo o bien se largaron a caminar.

En tanto, desde el gobierno nacional se insistió en el rechazo a los argumentos de la protesta y se volvió a señalar que se realizarán controles y sanciones a las empresas que sigan sin sacar los colectivos a la calle.

Cuando arrancó la medida de fuerza, desde la cartera nacional de Transporte se reconoció que quedaba una parte de deuda sin saldar, al tiempo que se afirmó que “se viene pagando semana a semana y reduciéndola”. Se indicó, asimismo, que “no se entiende” la protesta, ya que, dijeron, “los usuarios comenzaron a pagar desde el 1º de agosto un 40 por ciento de aumento”.