Conmoción por la muerte de una joven en Ensenada

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¿Qué le pasó? Esa era la pregunta que ayer por la mañana muchos vecinos se hacían en Ensenada cuando se enteraron de la muerte de una joven de 28 años en un departamento céntrico de esa ciudad.

Se trata de Micaela Soledad Cáceres, sargento primera del Cuerpo de Bomberos Voluntarios, quien fue encontrada sin vida en su casa de la calle La Merced entre Sarmiento y Perú.

El cuerpo estaba en el piso de su habitación, donde no había nada fuera de lugar. Tampoco en el resto de la propiedad.

Según el reporte oficial, recostada sobre el lado derecho de la cama, en la superficie corporal no aparecieron rastros que hicieran presumir de la posibilidad de un ataque por parte de terceros.

Tampoco se constataron daños en las aberturas de la vivienda, cuya puerta de entrada, incluso, había sido cerrada con llave y estas fueron localizadas en el interior del domicilio.

La autopsia, pedida por el fiscal Marcelo Romero, confirmó que el deceso se desencadenó por una insuficiencia cardíaca aguda, ad referéndum de los resultados posteriores de laboratorio.

Según voceros ligados a la investigación, serán los estudios histopatológicos los que, en definitiva, terminen de aportar claridad en medio de tanto dolor.

Es que si bien en la casa apareció una esquela escrita a mano, cuya redacción fue atribuida a la joven, sus familiares, en contacto con este diario, salieron a desmentirlo de plano.

Igualmente, por orden judicial, la carta quedó incautada y será analizada junto a otras evidencias obtenidas en la escena.

El operativo se desencadenó cuando el padre de la víctima llegó al inmueble cerca de las 10.30 y se percató de que estaba cerrado por dentro.

El hombre fue hasta el lugar, muy preocupado, ya que la hija no le respondía a ninguno de sus insistentes llamados.

En minutos, las redes sociales se cargaron de mensajes llenos de angustia y dolor ante un hecho inexplicable.

Uno de los más comentados pertenece a la Asociación Bomberos Voluntarios de Ensenada, que comunicó la triste novedad e informó que Micaela era hija del cabo retirado Leonardo Cáceres y que tenía dos hermanas en el cuerpo: Lucía y Eugenia.

Además era sobrina del jefe de la institución, comandante general Leonardo Curciarello.

“Acompañamos en este difícil momento a todos sus familiares, amigos y compañeros”, mencionaron en la publicación y a continuación, para finalizar, dijeron que “rogamos una oración en su memoria por su eterno descanso”.

 

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