Vuelve “La bestia que habita la noche”, parodia de policial

“La bestia que habita la noche”, parodia de policial negro escrito y dirigido por Diego de Miguel, regresa a la cartelera platense, y se ofrecerá los sábados a las 22.30 en el Viejo Almacén El Obrero, 13 y 71.

“La obra conjuga todos los elementos típicos del policial negro pero de algún modo subrayados, lo que supone el gesto paródico, que es un gesto ambiguo porque, por un lado, la parodia implica un poner en evidencia ciertos tópicos recurrentes de una obra pero, al mismo tiempo, también supone un respeto por eso que se parodia”, había contado el año pasado De Miguel, en diálogo con EL DIA, a propósito del reestreno de esta obra que, originalmente, había estrenado en 2009, con otro elenco y otra versión.

El director siempre había querido volver a su viejo material no sólo porque en su momento fue un pequeño (y su primer) suceso de cartelera sino por “esa idea que la obra refleja, de algún modo, de que el capitalismo puede leerse en clave policial”, un tema que le interesaba llevar al teatro.

Como todo policial negro, su pieza muestra una sociedad corrompida. Personajes oscuros, tenebrosos y dañados, algunos con hambre y otros con sed de venganza. Un mundo de ensueño en el que los matones gobiernan ciudades. Un mundo de hombres derrotados y perros que acechan en la noche. Un mundo de sombras apenas surcadas por los destellos de luz azul que nos recuerdan que allí, en la gélida noche, hay alguien que nos vigila. Un mundo como este, pero un poco peo

Protagonizada por Sofía Boué, Eugenia Molinuevo y Alejandro Santucci, “La bestia que habita la noche” cuenta la historia del turbio Jack Dogo, un alma en pena que habita el desolado mundo de los policiales negros. Sobrevive a duras penas, con su fiel secretaria Elsa, limpiando la basura de la sociedad. Una tarde, Ingrid Lucero lo contrata: debe recuperar unas fotos que la comprometen. Pero detrás de la luz que irradia su belleza, se oculta la oscura mirada del congresista Freddy Macro. Porque allí, en la gélida noche, hay alguien que nos vigila.

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