Los empeños de una casa: volver a una obra del siglo XVII para repensar el presente

“Los empeños de una casa”, una comedia de Sor Juana Inés de la Cruz (1648-1695), se ofrece los jueves a las 20 en el porteño Centro Cultural de la Cooperación. A cargo de la Compañía Argentina de Teatro Clásico, se trata de un material que aborda temas como “la seducción, el deseo, la transgresión y el honor pero desde un lugar diferente al uso de la época”, según aseguró Santiago Doria, que versionó y dirige esta propuesta.

Poetisa, escritora, erudita y pionera de la reivindicación de la mujer, y una de las figuras más importantes de la literatura colonial del siglo XVII, Sor Juana construye en esta obra una crítica contra las pasiones desenfrenadas, contra la inconstancia en el amor, y contra la preponderancia masculina; presentándonos a dos tipos de mujeres que actúan libremente, enfrentándose a las normas establecidas por el patriarcado.

En esta historia, a la casa de doña Ana van llegando inesperados visitantes a pedir asilo. Avanzando la noche, los enredos y equivocaciones propician amores cruzados. La joven y bella Leonor está enamorada de Carlos (también lo está Ana); don Pedro (hermano de Ana) pretende a Leonor sin ser correspondido, y don Juan que corteja a la propia dueña de casa. Don Rodrigo (padre de Leonor) y los sirvientes Celia, Castaño y Hernando aportan más enredos a la trama. Cada personaje busca con empeño lograr su deseo.

Creada y dirigida por el actor y director Santiago Doria, la Compañía Argentina de Teatro Clásico tiene su origen en 2017 con el estreno de “La discreta enamorada”, de Lope de Vega, y su éxito la llevó a seguir trabajando en el repertorio del Siglo de Oro español, por lo que nacieron “El lindo don Diego”, de Agustín Moreto, y “La celosa de sí misma”, de Tirso de Molina. “Los empeños de su casa” es su cuarto título del Siglo de Oro Español.

En diálogo con EL DIA, Doria se refirió a las riquezas de este material que se ofrece en la sala ubicada en Avenida Corrientes 1543 con descuento para jubilados, y a la vigencia e importancia de volver a poner a los clásicos en escena para repensar, a partir de ellos, el presente.

-¿Qué fue lo que más te sedujo de “Los empeños de una casa”? ¿Qué es lo más interesante de este material?

-Después de haber transitado autores como Lope, Tirso y Moreto, nos pareció necesario ingresar una figura femenina tan importante como Sor Juana Inés de la Cruz que supo demostrar su talento en una sociedad patriarcal y machista. De Sor Juana no podemos decir que sea feminista porque el feminismo no existía como tal en su época, pero sí abre el camino. Conceptualmente es feminista, y eso es muy importante porque nos hace reflexionar respecto a cómo la mujer, desde hace mucho tiempo está tratando, intentando, luchando , perseverando en tener un lugar en la sociedad a la par de los hombres.

Santiago Doria

-¿Qué elementos tiene, en general, la obra de Sor Juana Inés de la Cruz que permiten que, después de tanto tiempo, todavía sigan siendo representadas?

-Los clásicos son clásicos porque precisamente tienen algo para decirnos y creo que la transgresión de los preceptos hace que nos permita reflexionar en el hoy mirando hacia atrás y hacia adelante.

-¿Qué tipo de público te gustaría poder convocar con esta propuesta?

-Todo público desde la adolescencia a más de 90 años porque es un teatro popular, un teatro que llega; es un teatro que, como no se hace con frecuencia, la gente no tiene el hábito. En otros momentos del teatro en Buenos Aires había una costumbre, era habitual que se representaran “los clásicos”, en este caso, los del Siglo de Oro Español, y también los de nuestra propia lengua, los clásicos argentinos; pero eso ya en los últimos veinte años es más una excepción que un hábito.

-¿Qué es lo que más te atrae del universo de los clásicos? ¿Y por qué creés que, aún habiendo tantas vanguardias, siempre se vuelve a ellos?

-La intención precisamente de la compañía es retornar a hacer habitual las representaciones de los Clásicos que tanto tienen para darnos. Las vanguardias son vanguardias: porque para poder romper las formas tenemos que partir de los clásicos que nos aportan contenidos universales.

-Además de “Los empeños de una casa”, ¿en qué otros proyectos estás trabajando?

-Tenemos la idea de reponer a lo largo del año las otras piezas del repertorio. Hay una obra de Pacho O’Donnell “La Tentación”, que estamos haciendo actualmente con Raúl Rizzo y Pablo Shinji en el teatro El Border y hay también en proyecto una comedia muy tierna para la calle Corrientes para la segunda parte del año, del que todavía no puedo dar muchos detalles.