Toda goleada es positiva, pero la noche careció de euforia y el interés se centra en el futuro

Probó con el tándem Boselli-Carrillo y, quizás, lo vuelva a utilizar para aumentar la producción goleadora. Al ser todo fácil, faltó adrenalina

Edición Impresa

Martín Mendinueta

@firmamendinueta

Con la tranquilidad de haber hecho bien la parte que le correspondía, Estudiantes se fue a dormir con una sensación de doble sabor. Contento por haber ganado sin dejar ningún tipo de dudas, y un tanto frustrado por no haber podido terminar como líder de su grupo en la Sudamericana, el Pincha sabe perfectamente que en esta película internacional se le viene un capítulo fundamental.

El triunfo no vino a modificar el concepto que ya tiene Estudiantes como equipo. La debilidad del huésped boliviano no sólo estuvo lejos de sorprender, sino que además le impide al León de Eduardo Domínguez creer que su mejora ha sido sustancial. Los matices de tan sencilla prueba obligan a esperar el partido que afrontará el próximo sábado ante Central Córdoba de Santiago del Estero para concluir el diagnóstico.

El examen fue bien aprovechada por Eros Mancuso (reemplazante de Leonardo Godoy) para mostrarse, una vez más, como una alternativa válida para jugar en la posición de marcador lateral derecho con idoneidad para pasar al ataque.

No se advirtió lo mismo, por ejemplo, con el lapso en que le tocó jugar a Franco Zapiola, un joven del que se espera el despegue definitivo. Le tocó ingresar en el segundo tiempo y no pudo aprovechar una clara situación de gol.

La vara de la exigencia volverá a situarse en una estatura real durante la continuidad de esta competencia donde todavía no se vislumbra un candidato fuerte al título. Cuando el Pincha conozca la identidad de su próximo oponente tendrá un panorama más claro del camino que lo espera.

monólogo poco visto, donde sólo el anfitrión jugó para atacar

El partido empezó tal cual como se esperaba. Estudiantes se instaló en campo boliviano y se dedicó a buscar la precisión que necesitaba para perforar la resistencia de su débil huésped.

La gracia estaba en adivinar en qué minuto iba a llegar el primer gol y quién lo iba a convertir. Fiel a su sana costumbre Boselli rompió el cristal y dejó el hueco para que otros facturaran luego.

Fue extraño para los hinchas tener la certeza de que iban a terminar ganando por goleada y no sentir felicidad plena. Las cosas fáciles atenúan el mérito y hasta le cierran la puerta a la euforia que tanto se disfruta en el fútbol.

Estudiantes siempre supo que iba sumar los tres puntos y, a los pocos minutos de actuar con el traje de favorito, también sintió que la expectativa por terminar primero en el grupo se evaporaba sin pausa.

La ausencia total de suspenso hizo que el espectáculo se tornara desabrido.

mancuso se hizo notar y a Godoy le faltó mejores finales

En el marco de un boletín de calificaciones no tan sencillo de realizar, Eros Mancuso se llevó la calificación más alta. Pasó al ataque mucho y bien, estuvo conectado con sus compañeros y hasta se regaló la satisfacción de colorear la goleada segundos antes del pitazo final. Sin duda, la función positiva a él le sumó.

No ocurrió lo mismo con Franco Zapiola, quien venía siendo pedido por algunos hinchas y sobre el cual Domínguez parece tener un diagnóstico bien claro. El mismo que asomó con habilidad, frescura y goles en el ciclo comandado por el Ruso Zielinski, hoy no está en un buen momento y se ayer se notó.

Mientras Estudiantes espera su próximo rival copero (está claro que no será ningún cuco del continente), permanecen las incógnitas sobre algunos aspectos de su funcionamiento ofensivo.

La endeblez de Oriente Petrolero no permite elaborar un juicio de valor certero sobre el funcionamiento del tándem Boselli-Carrillo. Sosa no brilló y salió con una molestia. Matías Godoy volvió a mostrar problemas para terminar las jugadas que empieza mostrando habilidad.

El ataque sigue siendo un tema que genera debate. Veremos qué define Domínguez.

Boselli hizo trizas el cristal del aguante boliviano y abrió el camino para una victoria sin suspenso

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE