El portazo en la defensa hizo ruido

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El abogado Juan Carlos Saife presentó ayer su renuncia por razones “estrictamente personales” como defensor particular de la detenida Marcela Acuña, madre del principal acusado del femicidio de Cecilia Strzyzowski, quien desapareció el 2 de junio pasado en Resistencia, Chaco.

“Los motivos son estrictamente personales”, explicó el letrado, quien aclaró que seguirá siendo defensor del esposo de Acuña, Emerenciano Sena, también detenido por el caso sindicado como coautor del crimen.

“Este mediodía -por el de ayer- presenté el escrito de mi renuncia y la de mi socio, ahora la tiene que aceptar el equipo fiscal y ella buscará otro abogado. Y hasta que no acepte el cargo otro abogado, o nombre a un defensor oficial, yo sigo siendo su abogado”, indicó Saife, quien, a su vez, reiteró que Sena padre “es inocente” de la acusación que le endilgó la fiscalía.

“Hace cuarenta años que leo expedientes penales y tengo alguna habilidad para valorar la prueba. Mi opinión es que no hay ni un solo elemento de prueba que lo pueda asociar a Emerenciano Sena con la muerte”, consideró.

Demás está decir que la renuncia hizo algo de ruido, ya que coincidió con la nota que quisieron hacerle llegar al dirigente social para explicarle que, si Acuña abría la boca, los hundía a los tres, en relación a ella, a Emerenciano y al hijo (ver aparte).

La mujer, cabe destacar, tuvo que ser trasladada a un hospital para someterse a un control luego de sufrir mareos.

A raíz de ello, se recomendó que sea supervisada por un especialista para que determine si es necesario reajustar la medicación que toma para la tiroides.

 

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