“El otro gran clásico”, el de la seguidilla de robos

En una vivienda de 14 entre 32 y 33, un grupo de delincuentes aprovechó que la dueña estaba de vacaciones en la provincia de Córdoba.

Según trascendió, una hermana de la mujer fue la que acudió a la comisaría para contar que le habían entrado a robar.

Se trata del otro gran clásico de la Ciudad. Los escruches, esa forma del delito que a veces se maneja al voleo y otras con información precisa de las víctimas.

De acuerdo a fuentes del caso, eso es ahora materia de investigación. Saber si los ladrones cayeron de casualidad en el inmueble o si tenían datos de que no iban a encontrar a nadie que pudiera complicar sus planes.

Lo cierto fue que, en base a la denuncia, una vecina se contactó con la damnificada para darle una noticia tan desagradable como dolorosa.

Por eso, la propietaria del domicilio llamó a su hermana para avisarle y esta acudió al lugar para verificar qué había sucedido. Y, en efecto, encontró violentadas dos cerraduras.

Después, adentro, la escena era la de siempre, con todo absolutamente patas para arriba.

Entre los faltantes notó dos televisores, una aspiradora inteligente y un reloj.

EL ANTECEDENTE

Como publico este diario en su edición anterior, un día después de los golpes dados en una la Escuela Secundaria Nº11 “Mercedes Sosa” y también en la residencia de un vecino del barrio El Mondongo, cuya residencia fue asaltada mientras jugaba al fútbol, los especialistas en atracos en viviendas durante la ausencia de sus moradores volvieron a copar la escena policial con otro resonante hecho.

Esta vez, el episodio de inseguridad lo padeció una familia que se encontraba de viaje cuando autores ignorados ingresaron en su domicilio ubicado en 4 bis entre 648 y 649, aparentemente, con un objetivo muy claro: apoderarse de las costosas herramientas del dueño de casa.

Como en otros asaltos cometidos en lo que va del año, los ladrones volvieron a combinar la modalidad que encabeza la lista de delitos en la Región, el escruche, con la aplicación de técnicas mecánicas para vulnerar aberturas.

Es que para acceder a la vivienda, debieron forzar la puerta principal.

Por lo menos esa es la hipótesis más clara que tiene la Policía, ya que además de hallarla abierta tenía marcas que denotan que fue abierta ejerciendo palanca con un elemento contundente.

Todo el acto fue ejecutado a plena luz del día y sin que nadie se percatara.

Recién horas después del hecho, una vecina que se encontraba llegando a su domicilio a eso de las 18 horas observó una serie de anormalidades en la vivienda y decidió indagar un poco más.

Luego de abrir el portón, se dirigió a la puerta principal y además de comprobar que se encontraba abierta notó que faltaba una televisión. También comprobó que habían logrado dar con dos soldadoras y dos amoladoras, las cuales fueron ofrecidas a la venta a través de una conocida red social.

Como se indicó, toda la maniobra fue llevada adelante mientras los dueños se encontraban fuera de la Ciudad.

Según pudo saber este diario, la familia estaba en pleno disfrute cuando el dueño de casa recibió una notificación en su celular. El resto, es historia conocida.