¡Paliza!: volvió el mejor River y goleó a Vélez con baile

River volvió a ser River, aq uel equipo que dominó el primer semestre de la temporada anterior, ganando la Liga Profesional de punta a punta, y con una actuación sobresaliente goleó 5-0 a Vélez, equipo que el viernes recibirá a Gimnasia en el estadio José Amalfitani, de Liniers.

El partido correspondió a la tercera fecha de la Copa de la Liga, se disputó en el Monumental y la lluvia de goles empezó a castigar el arco defendido por Tomás Marchiori a los 3 minutos, cuando Facundo Colidio recibió de Barco y puso en ventaja a los Millonarios.

La ventaja inicial pareció encender al equipo de Martín Demichelis, que a partir de un dominio absoluto, de campo y pelota, pasó por arriba a un rival sin argumentos para ensayar algún tipo de reacción.

En su mejor versión de los últimos tiempos, River movió la pelota con una poco frecuente precisión en velocidad. Demasiado para un Vélez tan confundido que no hizo más que favorecer el despliegue del conjunto local con fallas en todos los planos.

Miguel Borja, de cabeza, aumentó a los 20 minutos, tras asistencia de Ignacio “Nacho” Fernández; de nuevo el colombiano se hizo presente en la red cuando sobre la media hora conectó de cabeza un tiro libre de Barco.

A esta altura de los acontecimientos, el partido estaba definido. Sólo quedaba establecer cuántos goles de diferencia podía haber entre uno y otro. Y antes que se completara la primera etapa, una jugada de manual desembocó en el cuarto.

Borja recuperó la pelota en la franja central, sobre la derecha, y la cruzó para “Nacho”, quien avanzó y cruzó por abajo para la llegada de Colidio, quien recibió tras una gentileza de Barco, quien la dejó pasar, y selló el 4-0 que hizo delirar a los ocupantes de las tribunas del estadio Monumental, que volvió a estar colmado en su 50 partido consecutivo.

Este cruce con Vélez, para River tenía una larga serie de condimentos que le daban un significado especial: la necesidad de festejar la primera victoria de local, tras el empate contra Argentinos y el triunfo ante Barracas, dejando muchos interrogantes, y la presencia en el banco de los suplentes de Rodrigo Villagra y Agustín Sant’Anna, las últimas dos incorporaciones.

Más otro detalle por corregir: la serie negativa frente a los velezanos en los siete enfrentamientos anteriores, que habían finalizado con apenas un éxito riverplatense: 2-0 en el campeonato de 2021, con anotaciones de Enzo Fernández y Brian Romero.

Para el segundo tiempo, Gustavo Quintero hizo un par de movidas con el propósito de frenar la tormenta con los ingresos de Abiel Osorio y Christian Ordoñez, aunque estaba claro que a Vélez solamente le quedaba esperar el final y quedar lo menos expuesto posible.

En ese marco, a los 9 minutos, una mala salida por la punta izquierda le costó la posesión de la pelota, y un centro que un marcador levantó en el camino en su intento por despejar, terminó siendo el 5-0 de River por intermedio de Borja, quien festejó un poco frecuente “hat-trick” de cabeza.

A partir de este nuevo grito llegaron los cambios de Demichelis, ya pensando en lo que viene, y aunque el dominio continuó siendo evidente, la profundidad de River no fue la misma, los toques se multiplicaron y Vélez, al que no le salió una jugada bien, por lo menos pudo frenar una goleada que dejó a su técnico en la cuerda floja, porque el empate contra Barracas Central de visitante y la posterior caída como local a manos de Independiente, sumado a esta goleada histórica en el Monumental, lejos estaba de las expectativas generadas al desarrollar el actual plantel.

La ilusión era dejar atrás la mala temporada anterior, aquella en la que terminó peleando el descenso hasta las últimas fechas, y por lo visto hasta aquí, el sufrimiento continúa viviendo en el Fortín.

Por el contrario, para River, este verdadero show de fútbol y goles, le permitió dejar atrás las dudas generadas desde la preparación realizada en Estados Unidos, que tuvo su continuidad en las primeras dos actuaciones de la Copa de la Liga, contra Argentinos y Barracas Central.

Bajas por transferencias, lesionados y convocatorias para los seleccionados con motivo del Preolimpico de Venezuela complicaron una actualidad que frente a Vélez parece empezó a mejorar.