En plena crisis, distintos talleres mecánicos “abarrotados” de autos
Edición Impresa | 16 de Junio de 2024 | 03:37

En los últimos meses se registraron subas en las cantidades de ventas de autos 0 km y usados producto de un cúmulo de incentivos en este sector. Sin embargo, hay un arrastre de meses anteriores donde, producto de la recesión económica, la actividad mostró otra cara y ese reflejo -de cómo se mueve el rubro automotriz- impacta en los talleres mecánicos de la Región. A saber, varios de estos lugares lucen abarrotados de coches pendientes de ser arreglados y, dentro de estas problemáticas, se encuentran otras más delicadas como las dificultades para conseguir algunos repuestos específicos, la no fabricación de partes de móviles viejos y demás complejidades que afronta el sector.
En diálogo con este medio, un mecánico que tiene su local en Berisso, cerca de avenida 122, explicó: “Si me llegan a traer un auto en estos días, tengo una o dos semanas de demora. El taller está lleno de autos y estaciono en la puerta a algunos que están en espera. La situación es particular porque, por la crisis, muchas personas no atienden a algunos ruidos o avisos que pueden dar los vehículos y llegan al taller cuando todo está mal y, sí o sí, tienen que parar el auto. Esto no solo es un costo de dinero, por la cantidad de plata a desembolsar para arreglar el embriague, los frenos o lo que sea que falle. También es un costo material porque hay familias que tienen un solo auto y les cuesta mantenerlo entre gastos de seguros, combustible y demás”.
“Desde enero a la fecha, estamos con un gran caudal de vehículos. Hacemos reparaciones preventivas como lo son el service o cambio de aceite y filtro y distribuciones. Los clientes siempre nos dicen: ‘Prefiero hacer esto ahora por si se me llega a fundir el motor ya que, por cómo está todo, me quedo a pata’. La verdad es que, por cualquier arreglo, se deben gastar mínimamente entre 50.000 pesos o $100.000 de piso y varía según el arreglo que deba hacerse. En este taller también hacemos tareas correctivas. Trabajamos con autos, como tope mínimo, que sean modelos de 2010 en adelante. Sin embargo, es una realidad que las cotizaciones se hacen y se actualizan diariamente. Ya no damos por siete días de vigencia, porque los repuestos y accesorios cambian de precios todo el tiempo”, comentaron desde un taller integral situado en plano centro de Los Hornos.
El encargado de un taller mecánico situado entre Parque Castelli y Plaza Sarmiento detalló: “Tenemos muchísimo trabajo que se ralentiza para fin de mes. De todas maneras, somos una referencia, dado que tenemos más trabajo que el resto de los talleres, sumado a que, como proveedores del Estado, atendemos a varias reparticiones y empresas particulares que nos aportan trabajo cuando al cliente común no llega al taller”.
“Nos destacamos en realizar el control general con un informe detallado con colores para que programes los trabajos a realizar con un orden según la urgencia que requiere la reparación. En este momento, por la crisis económica, los trabajos dejan de ser preventivos y son reparaciones por la falta de prevención, con lo que resultan más caras. No recibo vehículos con mas de 20 años y puedo elegir según el estado del auto”, aportó el mismo hombre anteriormente citado.
Desde Ensenada, otro mecánico aprovechó para sumar su experiencia: “Tengo el taller plagado de autos. No encuentro un respiro. No me puedo quejar porque siempre tengo trabajo, pero esto indica que menos gente puede acceder a coches mejores o que los autos que se utilizan son cada vez más viejos. Hay rodados de cientos de miles de kilómetros recorridos en las calles y eso se nota en los talleres mecánicos. Al mismo tiempo, si bien el taller está abarrotado de autos, considero que no puedo ‘matar’ con los cobros de los arreglos a la gente y prefiero bajar el costo de la mano de obra para que las refacciones sean más accesibles”.
Arreglos carísimos
Con el paso de los años, la dificultad para poder sostener y no quemar algunos ahorros hicieron que merme la capacidad de compra de bienes durables de los platenses y de los ciudadanos de todo el país. A modo de ejemplo, hace una década, pensar en comprarse un auto, incluso uno 0 km, requería de una cantidad de dinero mucho menor a la que se necesita actualmente.
Es por esto, y por la necesidad de trasladarse, que, actualmente, hay muchos platenses que apuestan a pagar lo que salga el arreglo en vez de guardar el dinero para comprarse un auto.
Enfatizan en que pocos hacen los service preventivos y algunos arreglos salen mucho dinero
Por caso, un burro de arranque de un Volkswagen Gol oscila entre 53.510 pesos en los modelos más viejos y $1.619.300, en los modelos más nuevos.
La caja de cambios de un Renault Clío alcanza $1.916.400 y arranca en $300.000 o, incluso menos si se opta por alguna parte usada.
El embrague de un Ford Ka tiene como tope $1.066.970 (el kit completo) y la base oscila en $110.840. A lo expuesto y junto a otros repuestos, se le debe sumar la mano de obra.
Los talleres mecánicos trabajan con demoras por la cantidad de autos
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE