Romero dijo adiós: el deseo de revancha que se hizo premonición
Edición Impresa | 24 de Junio de 2024 | 01:46

Era un secreto a voces. Sólo faltaba la confirmación oficial pero, sobre todo, la palabra del protagonista en cuestión. Sin dudas la más esperada por los fanáticos del Pincha.
Zaid Romero continuará su carrera en el fútbol de Europa, más precisamente en Bélgica, y dejará Estudiantes tras algo más de un año y medio en el club.
Quien llegó prácticamente como un desconocido desde Ecuador, con ganas de revancha personal, se va como un referente del fondo albirrojo, pieza clave para levantar nada menos que dos títulos con la camiseta del León: la Copa Argentina del 2023 y la Copa de la Liga 2024.
Sus muy buenos rendimientos le valieron no sólo una titularidad que nunca estuvo en duda, sino también el cariño del hincha, que rápidamente lo adoptó como propio.
De hecho, se trata de uno de los hombres más queridos por el público de Estudiantes no sólo por lo hecho en la cancha, sino por una forma tan particular de ser. Introvertido, trabajador incansable y muy importante en el día a día puertas adentro, supo ser fundamental y cumplir con aquello que se había propuesto antes de aceptar la oferta del Pincha, tras un llamado clave de Abel Balbo, que poco lo pudo disfrutar.
“Tengo una revancha acá en Estudiantes. Estoy muy feliz de estar acá. Con muchas expectativas de salir a la cancha y dejar al club en lo más alto”, le dijo a este matutino allá por enero del 2023 en su primera nota brindada como jugador del León. Lo cierto es que lo logró.
Aquel deseo de dejar al Pincha en la escena principal terminó siendo una premonición por parte de quien a lo largo de 63 partidos, convirtió 4 goles y brindó, además, una asistencia.
Los números, pero sobre todo su rendimiento, hablan más que el propio mendocino en cuestión, alejado siempre que puede de los flashes y de las luces tan opuestas a su personalidad.
Lo cierto es que a fuerza de mucho trabajo, su principal receta, Romero logró instalar su nombre en el fútbol argentino, donde lo pretendieron varios, relanzar su carrera profesional y, lo más importante a nivel grupal, hacerlo con dos títulos bajo el brazo.
En poco más de un año y medio, forjó un vínculo quizás inesperado con Estudiantes, el cual ninguno de los dos olvidará. Llegó como un auténtico desconocido. Se va referente, muy querido por todo el público y campeón. Nada mal lo suyo.
EL SENTIDO COMUNICADO DE ROMERO
“Ahora sí me despido de este club que para mí ha sido mi hogar, un lugar diferente al resto. Fue un orgullo poder vestir esta camiseta con tanta historia y ser campeón, que no es fácil. Pero siempre dejamos en lo más alto al club. No es una despedida tal vez como quería que fuera, por lo que pasó. Pero, sabiendo que fue un tiempo muy especial, conocí a muchas personas y amigos. Me llevo un pedazo de cada uno de ustedes en mi corazón! (Utileros, compañeros, cuerpos técnico, cocineros, kinesiólogos staff). Agradecerle a la gente por el aguante de siempre y el cariño. Nos vemos a la vuelta familia. Campeón de la ciudad”.
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