Otro robo millonario, ahora en una casa de Gonnet

A 200 metros de una dependencia policial y, en una zona plenamente urbanizada, otra familia platense sufrió un robo devastador.

El hecho ocurrió en las últimas horas en una vivienda de la localidad de Gonnet, sobre la calle 504 entre 15 y 16, cuando sus dueños salieron para un control médico.

Al regresar una hija del matrimonio al lugar, de acuerdo a la denuncia a la que accedió este diario, observó situaciones extrañas, que no solo le llamaron la atención, sino que además la llenaron de miedo.

Fue al aire al abrir la puerta de entrada a la casa, que se topó con un extraño saliendo de la habitación principal.

En ese instante de espanto, no pudo verle la cara, porque llevaba una capucha colocada. Apenas percibió que tenía barba.

Desesperada, la mujer, de 48 años, salió corriendo hacia la residencia de la tía, en el mismo terreno, quien fue la que se comunicó con el Centro de Emergencias 911.

También decidió activar la alarma vecinal, para prevenir a todo el barrio de la situación que estaban viviendo.

Al parecer, el intruso se coló en la propiedad tras forzar una ventana, justo en donde estaba el dormitorio de los padres.

En total, después de realizar un análisis de la escena, comprobaron el faltante de aproximadamente 1.600.000 pesos.

El dinero, explicaron los voceros a EL DIA, estaba repartido entre una cómoda y un placar en distintas piezas.

Las mismas fuentes no descartaron otras pérdidas, ya que todo lucía “patas para arriba” y será al momento de acomodar el desastre que las víctimas iban a tener una aproximación real de lo sustraído.

En el hecho, tomó intervención personal de la seccional decimotercera, con conocimiento de la UFI de Autores Ignorados Nº 9 de La Plata, que ya encargó la puesta en marcha de distintas diligencias probatorias.

Como es sabido por protocolo, una de esas tareas será el relevamiento de imágenes en las cámaras de seguridad y la existencia de potenciales testigos.

Los informantes aclararon que la familia habría optado por la no convocatoria de personal de la Policía Científica a la finca. Y había una razón más que evidente: varios de sus vecinos estuvieron en el lugar prestándole colaboración y contención.

Demás está decir que en la zona, ante este grave episodio de inseguridad, quedó flotando una sensación de preocupación y reflotó los reclamos por más patrullajes y otras medidas preventivas del delito.